Mi deber es reconocer la extraordinaria organización que se observa en la ex Rural de la mano de un joven, Santiago Torre, sus superiores del gobierno de Santa Fe y de un numeroso grupo de médicos, vacunadores, enfermeros y asistentes que actualmente atienden a adultos mayores y maestros con una atención pocas veces vista en esta época. Soy un ciudadano más que fue a vacunarse pero quedó impresionado por el respeto, la afabilidad y el fraternal acompañamiento a cada uno de los mayores en cada movimiento que debimos ejecutar. Esto es muy reconfortante, porque en una época tan difícil del país donde abundan noticias económicas y de inseguridad que apesadumbran, esto es un soplo de aire fresco y además nos alienta a pensar que los argentinos si dejamos de lado ciertos extremismos políticos, cuántas cosas podríamos hacer en pos de sacar este país adelante.
