En una ya añeja nota del diario del 23 de diciembre de 2018, se describe el procedimiento de
En una ya añeja nota del diario del 23 de diciembre de 2018, se describe el procedimiento de
En una ya añeja nota del diario del 23 de diciembre de 2018, se describe el procedimiento de detección de objetos arqueológicos por parte de aficionados “detectoristas” que munidos de detectores de metal, palas, mapas y cucharines, extraen material arqueolóigico de todo tipo. Allí se muestra la actividad como “un hobby a medio camino entre la arqueología y la historia”. En otros diarios digitales -ya más recientes- se refirieron a este hobby enumerando incluso que sólo en Rosario existen unos 50 detectoristas o arqueólogos aficionados. Las redes sociales también publican este tipo de actividad de fin de semana y hay una página web rosarina dedicada a estas búsquedas. La actividad es completamente ilegal, no está a medio camino. La ley nacional 25.743 especifica claramente que: “Las personas que realicen por sí, u ordenaren realizar a terceros, tareas de prospección, remoción o excavación en yacimientos arqueológicos y paleontológicos sin solicitar la correspondiente concesión ante la autoridad competente, serán pasibles de multa, la que se fijará de acuerdo a la magnitud de la alteración realizada y el decomiso de todos los objetos de naturaleza arqueológica o paleontológica que hayan sido reunidos, aunque se encuentren en posesión de terceros que aleguen adquisición de buena fe”, (art. 39). Las piezas expoliadas pasan de tener valor arqueológico en el suelo, a ser parte de colecciones privadas, sin otro valor que el de antigüedades en un estante del living. Se pierden las relaciones entre los fragmentos, no pueden saberse quiénes fueron sus usuarios originales. Según la ley, los únicos legalmente autorizados a tareas de excavación arqueológica son los profesionales y académicos, por concesiones de área y mediante trámites muy estrictos por parte de la provincia. Por lo tanto, sería importante que la prensa se interese en las actividades arqueológicas, pero siempre mediante el conocimiento de las normativas vigentes y así no dar un tono heroico a una infracción realmente dañina para el pasado santafesino. Y a los detectoristas que lean estas breves líneas, reúnanse y llamen a profesionales. No sigan haciendo daño. Se puede trabajar en conjunto, profesionales, detectoristas, comunas, museos, prensa; pero dentro de la ley.
Gustavo Fernetti
DNI 16.674 143
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