Mi carta es una queja que ya no es novedad, porque lo padecemos quienes pagamos un servicio de telefonía a una empresa que se burla de los clientes. Hoy, 2021, con una pandemia donde la comunicación es primordial porque no podemos salir y más en el caso de mi papá, una persona de riesgo por tener 83 años, está presa de esta compañía que nada le importa la gente. Realicé el reclamo el 29 de marzo pasado y me tomaron el pedido prometiendo enviar una patrulla técnica a reparar la línea el 4 de abril en el horario de 12 a 16. Estamos a casi 20 y si uno no llama para consultar nunca te enterás en qué quedó tu reclamo, la respuesta de la operadora es que es un problema “masivo” de 200 usuarios y que posiblemente esté solucionado el 30 de abril. Siento que es el cuento de la buena pipa, que juegan con la necesidad de la gente y mi bronca es que uno paga el servicio en tiempo y forma para que la respuesta sean numeritos y letras de un reclamo que nunca tiene solución. Por supuesto que no abonaré la factura que llegue a mi domicilio por un servicio que no prestan. Telecom estafa y es inoperante.