Presidente, cambie el rumbo
Presidente, cambie el rumbo
Con todo respeto a su investidura le digo que tanto usted como varios de sus colaboradores nos siguen burlando y tomando como idiotas a millones de argentinos. Por razones de salud no concurro a los banderazos pero es inadmisible que a los que asisten por miles y miles los llame “malos” y a los que usted arrastra con prebendas los designe “buenos” sabiendo que forman parte del sector aluvional del cristinismo. Por otro lado muestra un alto grado de ignorancia cuando compara una protesta en coches frente al domicilio del juez Lorenzetti con las hordas de nazis y fascistas de Hitler persiguiendo a poblaciones en Europa. Mis padres y algunos hermanos se escaparon de Lituania antes de 1938. Todos los demás, mis 4 abuelos y otros familiares formaron parte de los 6 millones de seres humanos que exterminaron en los campos de concentración, debidamente registrados y numerados por Eichmann. Esta bestia asesina, Priebcke, Mengele y casi 200 nazis más ingresaron y vivieron en Argentina gracias a Juan Domingo Perón que les vendió los pasaportes. Usted como ser humano, profesor de derecho y creo democrático, ha banalizado la Shoa y nos debe una disculpa pública a todos los argentinos y a la comunidad judía en particular. Una visita a Auschwitz, Bergen Belsen u otros, una recorrida por el Yad Vashem en Israel y otra por el Museo del Holocausto en México DF le servirán para no cometer más tamaña infamia. Miguel de Unamuno dijo: “La opinión de toda una multitud es siempre más creíble que la de una minoría”.
Jorge Rubnicius
DNI 4.392.258
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