Hermosos vocablos de campaña de Mauricio Macri y todos los cerebros de la economía que los apoyan, el gran sinceramiento de la economía que nos hacía crecer porque "se puede". Debemos creerles como el conejo que persigue a la zanahoria: todavía no, porque el gobierno anterior hizo desastres y tenemos que "normalizar" los descalabros que cometieron, además fueron ladrones y corruptos. Mientras tanto, el pueblo sólo tiene promesas de música, flores y dulzuras, la aplastante realidad nos brinda un gran crecimiento pero de pobreza e indigencia (estamos pronto a llegar a la época Duhaldista, de un 50 por ciento de pobres, un 15 por ciento indigentes), un panorama atroz. Siempre la culpa la tienen los "otros", que son los "malos argentinos que gobernaron antes que nosotros"; el asunto es que cada partido que asume, destruye sistemáticamente nuestras economías, calidad de vida, paz, y salud. Los paros de la CGT, para qué sirvieron. ¿Los incrementos de servicios, alimentos, ropa, combustibles y energía? ¿Los descuentos de las retenciones al agro y las exportaciones? Esto sólo sirve para enriquecer las arcas de los que más tienen en detrimento de los que menos tienen. No entremos más en sus juegos dialécticos, nocivos, tóxicos, enfermizos, violentos. Fíjense qué patriotas son, prácticamente ya no se festeja el Día de la Bandera o la Independencia, como fiestas populares. Antes, estas fiestas eran bastiones de propaganda política, ahora son fiestas para las guardias policiales y algunas decenas de autoridades. Consejo sano: no más cables de TV, no más programas de política, novelas. Si tiene pesos, compre dólares y guárdelos en caja de seguridad, infórmese con diarios y si puede, extranjeros por internet; dedique tiempo a su familia, es lo más preciado; cuide su trabajo, no se endeude con las tarjetas ni los bancos. Escuche a los mayores, no pierda tiempo como crítico de jugadores de fútbol, lea libros de cultura y ciencia, estudie cosas lindas y útiles. Escuche música, no grite, no se enoje, sonría siempre, trate de ser feliz en medio de este país con gente tan tóxica, nociva y violenta. Y cuando le toque el turno de votar, vote en blanco, pues no hay nadie a quién votar.