La carta de lectores de la señora Cristina Goytía, del día domingo 29 de mayo en La Capital, titulada “También ocurren cosas buenas”, nos recuerda que en Rosario existen muchas personas que luchan, trabajan y engrandecen la ciudad. Quizás todos tengamos algo más para aportar a su listado, como por ejemplo los teatros independientes impartiendo cultura y diversión, las ONGs integradas por personas voluntarias dedicadas a paliar el dolor ajeno, los profesionales de la salud que cotidianamente arriesgan sus vidas para proteger las nuestras, las maestras abocadas a realizar sus tareas con auténtica vocación, profesores de educación física organizando actividades constructivas para la juventud, universidades al alcance de todos. Si seguimos enumerando buenas acciones nos encontraremos con una larga lista de personas que trabajan y luchan por una ciudad mejor. Mucha, muchísima gente linda dispuesta a quedarse a vivir en Rosario para hacerla crecer. Por ello pedimos a las autoridades, exigimos, recuperar la paz perdida, que la Justicia sea justa, que encierre a los delincuentes y no los suelte, que la policía esté donde se la necesita, previniendo el delito para que todos, mujeres, hombres, niños, podamos transitar sus calles sin miedo y sin cuidados especiales. Si la ciudad de Rosario vuelve a ser la que fue, sin drogas, sin violencia y con equidad gubernamental, no sólo dejaremos de vivir entre rejas y llantos, sino que también la lista de la señora Goytía se agrandará de manera increíble. Porque en Rosario y desde siempre, existe esa potencialidad.