Recibí de la EPE facturas de dos bimestres (3º y 4º) por un total de aproximadamente 28.000 pesos, con consumos en kilovatios de 1.348 y 1.380 respectivamente. Todo producto del mal funcionamiento del medidor, hecho que ya fue verificado por personal de la empresa, con promesas de cambiarlo “en breve”. Mi consumo promedio para esos períodos es entre 350 y 400 kw/h. Esto me generó una sobrefacturación de aproximadamente $ 22.000 que la EPE me cobró de más. Ante mis reclamos, la EPE me informó que se está ocupando del tema, pero mientras las facturas siguen llegando y hay que pagarlas para que no te corten el servicio. Un auténtico abuso de poder de parte de una empresa monopólica, estatal y proveedora de un servicio esencial. Vergonzoso