Miércoles 15 de Mayo de 2019
Días pasados leyendo comentarios de un artículo sobre los códigos secretos que utilizaba Baratta para comunicarle por teléfono cómo había ido la recaudación diaria a Néstor Kirchner, leí uno que definía con precisión clínica la actitud que les cabe a quienes integran el núcleo duro del kirchnerismo. Le puedes mostrar fotos, pruebas, videos y cuadernos pero no te creerá nada, igual que cuando pretendes avisarle a un marido enamorado que le están saliendo protuberancias muy marcadas en la frente. Y es tal cual. Lo vemos en cualquier discusión abierta en televisión o radio, incluso en nuestras conversaciones cotidianas.
Roque Villazán