El municipio de Venado Tuerto propuso a los pequeños empresarios locales conformar un pool de compras para abaratar costos y ajustar medidas de control, ante la preocupación en los más de 350 emprendimientos de la ciudad que se encuentra invadida de supermercados chinos. En los despenseros barriales y súper venadenses hay incertidumbre porque temen una fuerte caída en las ventas.
El secretario de Ambiente municipal, Patricio Marenghini, explicó que los súper chinos "tienen dos estrategias con grandes ventajas, una Cámara de Supermercados chinos que regula los pooles de compra, con organización y una cultura de la unión muy arraigada y repercute en el precio final del producto, y además tienen como ventaja la mano de obra familiar, aunque la mayoría tiene nacionalidad argentina, por lo tanto, tienen que ser tratados de la misma manera".
Entre otros inconvenientes los venadenses sostienen que al abrir los domingos los perjudican a ellos. Marenghini detalló que "existe una ordenanza de grandes superficies, pero ellos abren varios locales de menor superficie y no son alcanzados por la ley de descanso dominical. Poner una traba legal desde el municipio en este sentido —como lo reclaman algunos sectores— no se puede, porque hay similares derechos y obligaciones para todos los habitantes de la Argentina".
Marenghini promueve una reunión con despenseros y titulares de minimercados y autoservicios, a quienes se les elevarán dos propuestas de estímulo: la creación de un pool de compra local con apoyo del municipio y la posibilidad de ofrecer productos básicos a precios accesibles, como una estrategia comercial de "anzuelo", con locales adheridos que podrán traccionar el consumo por la previa gestión de compras colectivas.
Marenghini, mantuvo días atrás una reunión con un grupo de comerciantes, representantes de distribuidores del rubro almacenes y minimercados, y miembros del Centro Comercial e Industrial de Venado Tuerto, quienes expusieron las problemáticas que afronta el sector, haciendo hincapié en la instalación de súper chinos. Acordaron trabajar juntos en la medida de lo posible y lo legal.
Desde el municipio se detallaron los requerimientos que se les exige a los súper chinos, y que son los mismos requisitos que cumplen los demás comerciantes. Además, se realizó un intercambio sobre los antecedentes jurídicos a nivel país, ante el desembarco de esos supermercados en distintas ciudades.
Para los comerciantes venadenses no chinos, hay competencia desleal porque no generan puestos laborales.
El funcionario municipal explicó que "ellos consideran que la mayor preocupación en relación a los supermercados chinos es que no se generan puestos de trabajo, ya que lo resuelven a nivel familiar en condiciones no reglamentarias".
Reseñó que en la reunión "uno de los puntos acordados es que se va a pedir, a través del Concejo, la intervención del Ministerio de Trabajo para ver de qué manera los comercios de la ciudad pueden aumentar la mano de obra, para reactivar el trabajo en Venado.
Además el municipio va a trabajar para mejorar los mecanismos de control bromatológico para todos los comercios del rubro almacenes, minimercados y supermercados".
Asociativismo
En tanto, desde el municipio se va a buscar una figura que incentive la integración o el asociativismo entre los comerciantes, para reforzar cuestiones como por ejemplo la difusión de las ofertas o promociones, para poder estimular el consumo de los productos de los comercios más pequeños.
"Tenemos una gran preocupación por la pérdida de puestos de trabajo en la ciudad, por eso decidimos trabajar junto a los comerciantes del rubro, para ofrecerles todas las herramientas que sean necesarias para proteger a los 350 comercios de este tipo que hay en la ciudad; ellos sostienen a muchas familias y dinamizan la economía de los barrios", remarcó Marenghini.