En Santa Fe, las netbooks ya están incorporadas a las tareas escolares: casi un 86 % de los estudiantes las usan para realizar trabajos del aula. El dato se desprende del estudio de “Seguimiento y evaluación de la implementación del Programa Conectar Igualdad (PCI)” encarado por la Universidad Nacional de Rosario (UNR) en la provincia.
El trabajo de investigación fue a propuesta del Ministerio de Educación de la Nación, tuvo alcance nacional y para eso sumó a once universidades nacionales, entre ellas la UNR que se encargó de saber qué pasa con esta herramienta en Santa Fe, Corrientes y Entre Ríos.
De acuerdo con este estudio radicado en la UNR —dirigido por Dardo Ceballos— el 95 % de los encuestados en la provincia “ya usaba la computadora antes de la llegada del PCI”, aunque con escasa incidencia en el ámbito pedagógico. La mayoría de las experiencias se vinculaba a laboratorios de informática.
Desde que el PCI se lanzó a nivel nacional, a mediados de 2010, las nets no tardaron en ganar terreno en las clases. Según el trabajo de la UNR, casi el 86 % de los alumnos usa esta herramienta para hacer trabajos escolares; y casi la mitad para hacerlos en red.
También conviven otros usos propios del mundo adolescente y que de alguna manera introducen un nuevo debate pedagógico sobre la llegada de estas máquinas a la clase. El 32 % también chatear, otro 38% la usa para las redes sociales (como Facebook), un 23 % para mandar mails y un 24 % para jugar. El 64 % por ciento de los chicos encuestados pertenecen a escuelas secundarias, mientras que el resto se reparte entre técnicas, agrotécnicas y de educación especial.
Materias. La investigación indica que hay bastante dispersión en las materias que más acuden a este recurso para enseñar. Sin embargo, entre las asignaturas más mencionadas (oscilan entre el 39 % y el 13%) aparecen inglés, lengua y literatura, formación ética y ciudadana, geografía, matemática, historia, química, biología y física.
Las netbooks cuentan con programas, recursos y material educativo para las distintas asignaturas. También están organizados para diferentes destinatarios y diferenciados con escritorios propios para docentes, estudiantes y familias.
Antes del PCI. ¿Qué pasaba antes de la llegada de las netbooks en al provincia? De acuerdo con el trabajo de la UNR, la presencia de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en las secundarias se limitaba a los laboratorios de informática. “Podemos decir que antes de la llegada del PCI la incorporación de las TIC en las escuelas, tanto desde un punto de vista técnico como desde una perspectiva pedagógica, era escasa”, puntualizan en el trabajo.
Sin embargo, rescatan “la existencia previa de políticas y programas relacionados con TIC y educación”. En el caso santafesino, “la conectividad otorgada desde el gobierno provincial a las instituciones educativas con la finalidad de alcanzar una digitalización de la gestión y administración”, además “de la línea de capacitación denominada Laboratorio Pedagógico, que articula todo lo relativo a TIC y educación en la provincia”.
Un tema que es clave para que las netbooks tengan plena llegada a todos es el del soporte técnico y la figura del administrador de red. Según el informe, “los funcionarios consultados en Santa Fe aseguran que el soporte técnico a las escuelas se ha venido desarrollando sin grandes problemas”, pero “en las escuelas se encuentran disparidades en este discurso: la mayor parte de actores escolares considera que no hay administradores suficientes y que la provincia no está brindando respuestas adecuadas en ese sentido”.
Los docentes. Otro punto clave para el PCI es el rol de los docentes. Al respecto, la evaluación de la UNR coincide que “sin lugar a duda, la capacitación docente se perfila como uno de los nudos gordianos de la implementación del PCI, aparece como clave para el éxito del programa en los discursos de los funcionarios y como reclamo urgente en los relatos que se componen alrededor de la institución escolar”.
Experiencias de trabajo. En la misma presentación, Sileoni advirtió que habrá que esperar hasta fines de 2012 para saber cómo impacta esta herramienta en los aprendizajes, será cuando se cumpla la meta de la entrega de 3 millones de netbooks en las secundarias, escuelas especiales y en los institutos de formación docente.
De todas maneras, el estudio permite una primera aproximación de las experiencias que se realizan en las aulas, desde las entrevistas realizadas principalmente a docentes y alumnos.
“En este plano de análisis se destacan las materias del área artística, de hecho son los profesores de música y plástica los que aluden a un acoplamiento fluido de las TIC con sus contenidos y actividades vinculadas a la imagen y al sonido”, explican. También “geografía o física son otras asignaturas en las que la imagen o el uso de simulaciones permiten resolver de modo simple el abordaje de contenidos complejos”. Otro ámbito donde se registran “interesantes propuestas de trabajo por parte de los docentes son las materias específicas de la modalidad técnica, que permite, además, una aproximación más estrecha a los contextos laborales y productivos”.
Familias. Por otra parte, desde la UNR recuerdan que los testimonios señalan que el plan “es ventajoso para la familia porque permite a sus hijos permanecer en la escuela, tenerlos más tiempo con ellos en sus casas debido a que ya no deben concurrir a un ciber para poder investigar, y de esta situación destacan el ahorro económico y la seguridad que sienten al respecto”.
Y algo más: “Destacan que a partir del PCI sienten que sus hijos tienen mayores oportunidades de cara hacia una inclusión en el mundo laboral”. Además se enfatiza en el poder integrador que tienen las TIC “sobre todo en las comunidades pequeñas donde el acceso a capitales simbólicos (medios de comunicación impresos, radiales o televisivos, libros, espectáculos, bienes culturales, etcétera) es absolutamente limitado”.
En el acto realizado el martes pasado en el Palacio Pizzurno, para conocer los resultados de este seguimiento a nivel nacional, el ministro Sileoni indicó que las “netbooks llegaron para quedarse”, resaltando una y otra vez el poder de inclusión, retención y mejora que significa esta herramienta. Pero también que “pasado el resplandor inicial que representa su arribo a las aulas el reto es darle continuidad y sostener el programa día a día”. “El PCI es de tal envergadura —dijo— que seguro requiere de revisiones y correcciones constantes”. Habló así de las dificultades y desafíos a enfrentar, entre ellas la capacitación docente y asegurar el piso tecnológico necesario para que esta herramienta funcione sin obstáculos.