“La lectura se promociona desde la recreación, ya que el acto de leer o escuchar una
lectura, si resulta placentero, es multiplicador”. Con esta certeza la Biblioteca José Manuel
Estrada desarrolla una serie de propuestas para acercar a los niños y adultos a los libros. El
alcance de este proyecto fue distinguido con el Premio Pregonero a Biblioteca 2008, en la 19º Feria
del Libro Infantil y Juvenil, que se realiza en Buenos Aires hasta el 8 de agosto.
La biblioteca municipal de la esquina de Servando Bayo y Córdoba recibirá la distinción el
próximo 7 de agosto en la Ciudad de Buenos Aires. La directora del espacio de lectura, Marcela
Andino, asegura que es un “reconocimiento a todas las personas que trabajan y han trabajado
por promover la lectura” desde ese espacio.
En septiembre próximo, la Estrada cumplirá 45 años. Marcela Andino asegura que desde que se
fundó el trabajo ha sido crear un vínculo permanente con los vecinos. “Eso lo vivimos cada
día en el abrazo que nos dan los chicos, cuando nos saludan con un beso, o los lectores nos acercan
un comentario”, cuenta para hablar del lazo creado con la comunidad.
Marcela Andino está a cargo de la dirección de la Estrada desde 1990. Dice que es una política
de trabajo invitar de manera permanente a los chicos a los textos. Cita como ejemplo que cuando van
a resolver una tarea escolar, el primer paso es orientarlos con los libros y luego si es necesario
en internet.
“Es clave que puedan buscar información, saber primero lo que necesitan”, dice
Andino para reforzar la estrategia de trabajo que se fijan como profesionales.
Pero para la directora hay un aspecto que es clave si se trata de entusiasmar a los chicos con
la lectura y ese es el juego. Por eso muchas de las actividades que despliegan es a partir de la
recreación, como sumar el teatro, la magia, los talleres de ajedrez o la hora del cuento.
La biblioteca también tiene en sus metas sumar a los más pequeños, a través de un proyecto que
se llama “Bebés a bordo”, que pretende entusiasmar a las mamás para que les lean a sus
hijos desde temprana edad; además de seguir la tarea que tienen con los jardines maternales de la
zona.
También con las escuelas. La Estrada recibe unos 300 lectores diarios. La mayoría
son chicos y adolescentes. Muchos se acercan para hacer la tarea escolar, otros para sumarse a las
visitas guiadas. Un dato para resaltar si se tiene en cuenta que este espacio alcanza a unas 40
escuelas públicas y privadas de la zona oeste. “Es fundamental el vínculo que se ha creado,
tenemos chicos que vienen todos los días, otros que pasan toda la tarde aquí”, cuenta
Andino.
Por si fuera poco, está en los planes de la institución acercar más y con otra alternativa la
biblioteca a muchos chicos pequeños, con padres adolescentes, junto a una propuesta integral que
sume a unos y otros como lectores. Claro que esta vez, la biblioteca iría hasta ellos.
La directora afirma que a la Estrada llegan consultas de otros barrios, “lo cual es un
orgullo” y destaca una y otra vez que “el premio es de todos por el compromiso que hay
en el personal hacia la comunidad”.
El Premio Pregonero busca “dar público reconocimiento a los difusores de la literatura
infantil y juvenil, quienes desarrollan su vocación de manera persistente y a veces silenciosa, en
diferentes ámbitos de la actividad y del país”. El jurado estuvo integrado por Oche Califa
(escritor y periodista), Lucía Laragione (narradora y dramaturga), Juan Sasturaín (escritor) y
Oscar González (editor y miembro de la Feria del Libro), quienes por unanimidad decidieron
otorgarle el galardón a la Estrada. Los premios consisten en réplicas artesanales de la carreta
“La Andariega”, de Javier Villafañe, y diplomas.