Un excombatiente de la Segunda Guerra Mundial, que nació como Peter Davies, decidió a sus 90 años iniciar el proceso de cambio de sexo, luego de permanecer durante toda su vida viviendo "una mentira", como admitió hace unos días.
Hoy, Patricia -tal el nombre que ha adoptado-, inició el proceso de cambio de sexo.
Ya a los tres años, este fotógrafo industrial retirado, natural de Leicestershire (Inglaterra), supo que no estaba en el cuerpo correcto.
"Yo habría sido clasificado como homosexual y ya está. Habría tenido problemas en el ejército y me habrían encarcelado".
Pasaron los años y Peter Davies luchó como soldado en la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) y después del ejército contrajo matrimonio con una mujer con la que permaneció casado durante 63 años. Temía que si mostraba su verdadero ser le complicaran la vida, lo discriminaran en la familia o agredieran por la calle. "Ahora me he quitado un gran peso de encima. Vivía una mentira", comentó recientemente en la prensa británica, donde le dedican amplios reportajes fotográficos.
Decidió adoptar el nombre de Patricia en su nueva vida homenajeando a una gran amiga que se llamaba de ea manera. Detalla que en todos estos años no era completamente infeliz, ya que podía mirar el lado positivo de las cosas, pero sabía que algo no estaba bien.
En su juventud no se sabía mucho sobre la transexualidad. "Yo habría sido clasificado como homosexual y ya está. Habría tenido problemas en el ejército y me habrían encarcelado", recuerda este veterano de la Segunda Guerra.
Alguna vez intentó mostrarse como se sentía, pero en una ocasión unos desconocidos la cazaron con zapatos de mujer y le arrojaron huevos a la fachada de su casa. Eso hacía que se encerrara aún más en ella misma, al igual que escuchar que a las personas como ella se las trataba con descargas eléctricas.
Un día, ya pasados sus 60 años, descubrió la palabra "transgénero" en un programa televisivo donde presentaban a un hombre que se vestía como mujer porque era como se sentía y eso fue el detonante de Patricia Devies. "Fui corriendo a por mi esposa y se lo conté todo. Ella fue muy comprensiva conmigo y, aunque acordamos mantenerlo en secreto, ella solía comprarme joyas y me llamaba Patricia", relató en varios medios británicos.
Su mujer fue su gran apoyo y consiguió que Peter fuera Patricia en su casa. Sin embargo, ella decidió cambiar de sexo después de que su esposa falleciera hace unos años. "Es lo que ella hubiera querido", asegura.
Desde que empezó el proceso, Patricia recibió el apoyo de sus vecinos y conocidos. Incluso ya forma parte de The Beaunmont Society, un grupo de apoyo a la comunidad de transgéneros. "Me siento muy aliviada y soy muy feliz de ser aceptada como mujer", asegura Patricia.