El año que viene voy a ir a la Técnica Nº 5, la elegí porque ahí se estudia para ser maestro mayor de obra y yo quiero serlo. En realidad, después quisiera ser arquitecto, pero es una carrera muy larga, entonces mientras estudio podré trabajar.
El año que viene voy a ir a la Técnica Nº 5, la elegí porque ahí se estudia para ser maestro mayor de obra y yo quiero serlo. En realidad, después quisiera ser arquitecto, pero es una carrera muy larga, entonces mientras estudio podré trabajar.
Me gusta esa profesión por la matemática, eso de estudiar el área, la superficie, poder diseñar. También es lindo estar en las obras en construcción, al lado de mi casa hay una que miro siempre.
Nunca entré a una escuela secundaria. No sé mucho cómo será, pero me parece que más difícil. Eso porque en la primaria te dan un tema, te lo hacen estudiar y te toman una prueba. En cambio, en la secundaria te toman varios temas por trimestre, es más para estudiar.
A veces pienso que en el secundario me va a costar hacerme de amigos nuevos. Y a los profesores los imagino parecidos a mi maestra Graciela, de matemática, que es estricta pero no mala, aunque a veces grita un poco. Un buen profesor tiene que ser así, saber de la materia.
Otra cosa que hace que un profesor sea bueno es que cuando hay algún problema sepa ponerse en el lugar de los alumnos. Y también, por fuera de lo que enseña, tiene que conocer de la vida.
Me gustaría que la secundaria tenga computación y también ajedrez, porque yo lo juego.
En una buena escuela tiene que haber mucha atención para los casos de emergencias, seguridad y que sea para el estudio, pero tampoco que no te dejen hacer nada. El edificio tiene que tener patios grandes, como los de la Arzeno, con juegos y aros de básquet, pero también con ventiladores que funcionen, con luz y borradores.
No soy muy amante de la música, prefiero el rock y la cumbia, ningún tema en especial. Me gusta ir al cine, pero no siempre puedo por la entrada y el tiempo. La última que vi fue la argentina de los Superagentes. En mi casa no tengo computadora, cuando voy al cíber es para chatear y jugar.
(*) Alumno de la Escuela Juan Arzeno