En Washington, organizaciones defensoras de los derechos humanos, incluida la rama local de Amnistía Internacional, planean hacer una protesta frente a la Corte Suprema y luego marchar hacia el Senado para pedir a Obama que use sus atribuciones ejecutivas para hacer a un lado las restricciones que fijó al Congreso al desplazamiento de los reos a penales de Estados Unidos y cierre el centro de detención antes de la asunción del nuevo presidente, programada para el 20 de enero. Es una perspectiva improbable ya que tropezaría con cuestionamientos legales y sería anulada seguramente apenas Trump asuma. "Queremos que todos los reos de Guantánamo sean acusados y juzgados justamente o liberados", declaró Elizabeth Beavers, de Amnistía Internacional. "Lo consideramos la única salida legal".En este contexto, hay programadas manifestaciones en Londres, Los Angeles y Washington en las que activistas lucirán los uniformes anaranjados que simbolizan el centro de detención, a pesar de que los han usado solo un puñado de reos que violaron las normas del centro o están siendo sometidos a acciones disciplinarias.