El director ejecutivo de la Cámara de Exportadores de Citrus del Noreste Argentino (Cencnea), Mariano Caprarulo, advirtió que por la crisis que atraviesa el sector también podrían repartir fruta en la Plaza de Mayo, como medida de protesta.
El director ejecutivo de la Cámara de Exportadores de Citrus del Noreste Argentino (Cencnea), Mariano Caprarulo, advirtió que por la crisis que atraviesa el sector también podrían repartir fruta en la Plaza de Mayo, como medida de protesta.
Así, repetirían la protesta que hicieron la semana pasada los productores de manzanas y peras rionegrinos. Los productores lecheros también adelantaron que irán a la histórica plaza a realizar una protesta similar, en reclamo de un aumento del precio de la materia prima.
En el caso de los citrícolas, Caprarulo cuestionó a las autoridades provinciales y nacionales y aseguró que la situación que viven los productores de peras y manzanas del Alto Valle de Río Negro es un "espejo" de la realidad de los productores del NEA.
"O dejamos de existir o agarramos las naranjas y mandarinas, hablamos con los colegas de la Federación del Citrus y nos vamos a la Plaza de Mayo a repartir frutas como última medida", indicó a la prensa de Entre Ríos.
"Todo el mundo se llena la boca con las economías regionales", manifestó Caprarulo, quien se quejóporque "a los exportadores nadie los cuida, y al no cuidarlos tampoco cuidan el mercado interno, porque estamos todos peleándonos por vender una naranja o una mandarina en un mercado totalmente deprimido".
Resaltó que los costos de producción de un kilo de cítricos se encuentra por debajo de lo que se le paga al productor y "después los supermercados hacen lo que quieren", dijo.
Avicultura. Por otro lado, un informe privado indicó que en los primeros siete meses de 2016 la producción de carne aviar presentó una merma del 7,3 por ciento con relación a igual período de 2015 y el consumo interno cayó 5,4 por ciento.
Según la consultora Investigaciones Económicas Sectoriales (IES), la producción alcanzó un total de 1.083.000 toneladas contra las 1168 mil toneladas del acumulado de enero-julio de 2015.
El consumo interno cayó 5,4 por ciento, al tocar a un promedio de 40,9 kilos, por persona, al año y la merma fue superior al de otras carnes, ante el mayor impacto que representó la suba del precio del maíz dentro del segmento.
Ocurre que "el precio interno del maíz tuvo un fuerte incremento del 135,3 por ciento en los primeros siete meses del año por la quita de retenciones a los cereales y el ajuste del tipo de cambio". Por este motivo, los precios mayoristas del pollo subieron 69,3 por ciento.