El presidente Mauricio Macri sostuvo ayer en Rosario que la Argentina va "en camino correcto" con las políticas económicas que implementó desde el inicio de su gestión, dijo que esas medidas están destinadas a generar "confianza" y "certidumbre", condiciones esenciales para generar las inversiones y creación de empleos que el país necesita.
"Los trabajos no se generan por casualidad, tienen que ver con la inversión y la confianza", dijo el presidente al encabezar el acto de inauguración de la nueva línea de producción del flamante auto de General Motors, el Chevrolet Cruze II, en la planta industrial de Alvear, que demandó una inversión de 740 millones de dólares.
Ese contexto fue propicio para que Macri resaltara el acuerdo que llegó el lunes con empresarios para congelar eventuales despidos por 90 días. "Quiero agradecer, frente a tanta incertidumbre y miedos que hay en Argentina, a los cientos de empresas que se comprometieron a decir no sólo que no van a despedir sino que están pensando en ampliar los puestos de trabajo. Ese es el camino, trabajar juntos para crear valor, apostando al talento y creatividad de nuestra gente", sostuvo Macri en el escenario montado en la plante de General Motors, que compartió con el gobernador Miguel Lifschitz; la CEO mundial de la automotriz, Mary Barra, y el presidente de la firma en Argentina, Carlos Zarlenga.
Las palabras de Macri sobre la necesidad de generar "confianza" para abonar el clima de inversión se da en un contexto de extrema tensión política entre su gobierno, los sindicatos y sectores de la oposición que insisten en aprobar en la Cámara de Diputados la denominada ley antidespidos, que ya tiene media sanción en el Senado.
Oposición. Macri se opuso desde el primer momento a esta ley y ya avisó que la vetará si se aprueba en Diputados. Pero en una jugada política, un tanto a destiempo, promovió el acuerdo con los empresarios que vio la luz el lunes pasado. Si bien corrió detrás de los acontecimientos, la medida anunciada provocó fisuras en el bloque opositor, donde los diputados del Frente Renovador de Sergio Massa ahora comenzaron a dudar si acompañarán o no al kirchnerismo en la aprobación de la normativa.
El presidente, sin embargo, advirtió que la situación laboral, y el temor a los despidos, le coparon la agenda política, de allí la necesidad de rubricar un acuerdo con los empresarios para intentar llevar calma al conjunto de los trabajadores y contrarrestar el efecto político de una ley en el Parlamento, donde sufriría un derrota segura.
Ayer, por caso, Macri volvió a criticar esa ley, aunque no la mencionó. "No hay que caer en la arbitrariedad, la confrontación y la agresión; ni querer decir por ley o por decreto que las cosas son de tal manera", sostuvo.
El presidente se muestra convencido de que las primeras medidas de su gobierno (eliminación del cepo al dólar, a las trabas a las exportaciones, junto con la reducción y quita de retenciones) están generando un buen clima para las inversiones, sin el "intervencionismo" estatal que imperó durante el kirchnerismo. Es más, la CEO del grupo, la norteamericana Mary Barra, en su discurso elogió abiertamente a Macri por la liberación de la economía.
Palos a gestión K. En ese juego de contrastes, el jefe del Estado dijo que el gobierno anterior generó "trabas, obstáculos y alteraciones de las reglas de juego", y sentenció: "Eso hizo que se detenga el proceso de creación de empleo. La Argentina lleva cinco años sin crear empleos de calidad".
Macri, en otra alusión a la "herencia recibida", destacó que el horizonte de su gobierno "es la búsqueda de la verdad, y que si se cumple con esa condición, lo demás cae por añadidura".
En ese sentido, el presidente sostuvo que en "la búsqueda de la verdad, de reconocer que no estábamos bien, salimos del cepo, removimos todas las trabas y retenciones a las exportaciones porque queremos que todos los argentinos aspiremos a ampliar las fronteras a las cuales podemos llegar con nuestro trabajo".
En relación a la inversión que hizo General Motors, Macri dijo que cuando una gran empresa hace eso empuja el desarrollo de otras menores. "Este tipo de empresa nos ayudan a desarrollar el eslabón más importante que tiene una sociedad, que son las pymes. El 70 por ciento del trabajo en este país está en las pymes. Este tipo de compañías genera una red de pymes. Y todos soñamos con ayudarlas para que se transformen en grandes empresas, porque en cada paso que den hacia adelante irán incorporando más trabajadores", agregó el mandatario.
Antes de estampar su firma en el capot del nuevo auto de General Motors, Macri hizo un paralelismo entre el flamante producto y la plataforma de su proyecto económico: "Este es el país con el que sueño, que pone el marcha el motor del auto que está listo para arrancar".
Macri llegó a la General Motors acompañado por su ministro de la Producción, Francisco Cabrera. Además, estuvieron los senadores santafesinos Carlos Reutemann y Omar Perotti; la intendenta Mónica Fein, el jefe comunal de Alvear, Carlos Pighin, y un numeroso grupo de concejales.