El ex presidente y titular del PJ, Néstor Kirchner, hizo un respaldo categórico
a la postura del gobierno en el conflicto con el campo, cuestionó con dureza a algunos medios de
comunicación y convocó al acto de mañana en plaza de Mayo. “Nos están extorsionando y quieren
que las cosas no lleguen para generar malestar de la gente". Al final, ya cuando se
retiraba, dijo que "todo el mundo lo sabe, los cacerolazos no fueron espontáneos".
El santacruceño llamó a conferencia de prensa en el Hotel Panamericano en
calidad de titular del Partido Justicialista para las 15, dos horas antes del esperado discurso de
la presidenta Cristina Fernández, quien hablará en cadena nacional en ocasión de un acto de
homenaje, en el Salón Blanco de la Casa Rosada, a las víctimas del bombardeo a plaza de Mayo,
durante el fallido golpe de estado contra Perón de 1955.
Las palabras se hicieron esperar más de 30 minutos y Kirchner se sentó a la mesa
acompañado por el jefe de Gabinete, Alberto Fernández; el ministro de Planificación; Julio De Vido
(únicos ministros del gobierno); el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli; el titular de la
CGT, Hugo Moyano; el vice del PJ, Alberto Balestrini, entre otras autoridades.
Luego de agradecer primero convocó “a todos los argentinos al acto de
mañana a las 15 en plaza de Mayo. En defensa del sistema democrático y en defensa de poder
convivir pensando diferente sin caer en el autoritarismo agresor”.
“Nos parece importante poder discutir las ideas y rechazamos la imposición
de ideas. A la Argentina le tocó vivir la imposición de ideas y fueron momentos muy dolorosos.
Algunos sectores siguen sin entender qué es la democracia”, agregó. Aunque se refirió
duramente al sector agropecuario:
“Nos están extorsionando y quieren que las cosas no lleguen para
generar malestar de la gente, quieren usarlos y después tirarlos, pero ustedes no se engañan
más, lo tienen perfectamente claro”, aseguró.
A continuación se dedicó a enumerar los logros de la gestión kirchnerista:
“Generamos una Corte Suprema nueva distinta, estamos creciendo, generamos 4 millones de
empleos, jubilamos 1,6 millón que habían quedado afuera en el 90, construimos más de 300 mil
viviendas, generamos políticas sociales profundas, recuperamos el salario de los argentinos en
paritarias, con diálogo. Terminamos con el FMI, hicimos una quita del 70 % de la deuda externa
privada, terminamos con las leyes de indulto y punto final”. Allí le dedicó un párrafo
especial a la militante Cecilia Pando, vinculada a sectores que cuestionan la política de derechos
humanos oficial. “Por eso no nos extraña ver a la señora Pando en las últimas
manifestaciones. Todos los sectores vinculados a la represión están brindando logística. No nos
perdonan nuestra política de derechos humanos”.
Acto seguido intentó aclarar el tema de las retenciones. “Saben qué es lo
que se está discutiendo acá. Las retenciones no son una medida fiscalista, tienden a la una
redistribuición del ingreso. Quieren que esto no exista para llevarse toda la renta. Estamos
defendiendo a la clase media y al trabajador argentino. Estamos defendiendo la mesa de los
argentinos. La presidenta no toma esta medida para perjudicar a los argentinos, es una medida
solidaria. Si se sacan las retenciones, se va a perder lo que se ha logrado en estos 5
años”.
En su discurso contra los medios de comunicación fue particularmente enfático:
“Por qué los medios están trabajando coordinadamente ¿Por qué ese discurso maniqueísta y
falso? Yo sé que hay algunos dueños de medios que son productores grandes en la Argentina y tratan
de forzar una situación ¿Por qué algunos pueden cortar rutas? ¿porque son un poco más blancos? ¿Si
nosotros llamamos a un acto es provocativo y si otros cortan una ruta, eso es democracia?.
Algún día se van a tener que mirar al espejo”, dijo el titular del PJ. Se refirió
especificamente a los grandes medios "como La Nación que ya sabemos comno piensan... un día pedían
tolerancia cero para los transportistas y al otro día para los que cortaron rutas, tolerancia
total.”
Por último les pidió a los argentinos “que nos ayuden y que se ayuden".
"En mi mandato, en los primeros dos años me dijeron que era un inepto, que era todo una anarquía.
Hermanos y hermanas que no tenian que comer me cortaban la calle todos los días, eso molestaba a
muchos porque eran morochos, como ellos dicen, incluso muchos estuvieron presos hasta dos
años". Y siguió: "Resulta que ahora lo mismo es democrático, nos están extorsionando, hacen el
desabastecimiento de comida para eso, nos hicieron subir los precios, quemaron campos
y murieron diez personas".