Dispersa en distintos actos, la conmemoración del Día Internacional de los trabajadores adquirió un alto voltaje político en el país. En la gran mayoría de las concentraciones llovieron críticas a las políticas de ajuste del gobierno nacional. Pero el presidente Mauricio Macri tuvo su contraacto, organizado en el microestado de Ferro por el ruralista Gerónimo Venegas (Uatre). Desde allí, exigió mayor productividad a los obreros, volvió a acusar a los sindicalistas de patoteros y mafiosos, y anunció a los empresarios que podrán computar como parte del sueldo los fondos asignados al pago de planes sociales, cuando contraten a beneficiarios de esas políticas.
El plan Empalme fue el principal anuncio que realizó el jefe del Estado en el acto organizado por el titular del sindicato que agrupa a los trabajadores rurales.
Pretende incentivar a los empresarios para que contraten a beneficiarios de programas sociales. Para ello, les permitirá computar como parte del sueldo la asignación que hace el Estado. Así, el trabajador no pierde el subsidio si lo contratan en el sector privado, y el empleador se ahorra parte del salario.
A modo de ejemplo, si una empresa contrata a un beneficiario de Argentina Trabaja con un sueldo neto de 12.000 pesos durante dos años el Estado le pagará a esa firma el monto de ese plan, que hoy equivale a 4.030 pesos por mes.
Patoteros y mafiosos
■□Contra lo que se había especulado, no hubo anuncios sobre el impuesto a las ganancias. Macri volvió a citar a Perón para decirle a los trabajadores que tienen que ser más productivos y arremetió contra los sindicalistas y organizaciones sociales que lo critican.
"No va más el país de la ventajita, de la patota, el país con comportamientos mafiosos", aseguró. Y advirtió: "No me voy a bancar a ninguno que me quiera llevar por delante porque yo estoy acá por ustedes, no para defender a ningún mafioso".╠
"El cambio ya comenzó y recorre la Argentina, aunque hay mucha gente que no lo puede sentir, y va a incluir a todos los argentinos", prometió, luego de asegurar que la economía argentina había creado 80 mil empleos privados desde agosto, contra los casi 150 mil que perdió en todo el año.
La CGT
■□Horas antes, la Confederación General del Trabajo (CGT) realizó un acto en el estado de Obras Sanitarias, en el cual llovieron críticas al gobierno y también al Momo Venegas, a quien compararon con Augusto Timoteo Vandor.╠
■□"¿Quién puede sostener que con media población que tiene dificultades para llegar a fin de mes (se) puede creer en una democracia y en la república?", consideró Juan Carlos Schmid, uno de los tres líderes de la CGT. Del acto, que fue agitado por el duelo de hinchadas entre Camioneros y la Uocra, participó también el triunviro Héctor Daer pero no el tercero de los conductores, Carlos Acuña, no participó.╠
Madura otro paro
En la escuela itinerante levantada por los gremios docentes frente al Congreso, el sindicalista Hugo Yasky, líder de la Central de Trabajadores de la Argentina de los Trabajadores (CTA-T), aseguró que "hay en el horizonte" de sus representados "otro paro general" contra el gobierno. Esa central, junto a la que conduce Pablo Micheli (CTA-A), se manifestó con un masivo acto en el mismo lugar en el que hace pocas semanas fueron reprimidos los maestros. "Nadie está de rodillas, esta batalla va a continuar", sostuvo el dirigente.╠
■□Las organizaciones sociales, como la CCC, la CTEP y Barrios de Pie, se concentraron frente al Monumento Canto al Trabajo. Advirtieron que si el gobierno no logra detener el aumento de la inflación, que superó el 40 por ciento en 2016, "en dos meses se llegará a una pobreza nunca vista".
Izquierda
Las fuerzas políticas de izquierda recordaron a los mártires de Chicago, condenados a muerte en el marco de la pelea a favor de la jornada laboral de 8 horas, con dos actos: uno en la Plaza de Mayo y otro en el Obelisco, donde se destacaron las críticas hacia las "políticas de ajuste" del gobierno nacional y el reclamo por un "paro nacional".
Frente a la Casa Rosada manifestó el Frente de Izquierda. En tanto, en el Obelisco se realizó otro acto del que participaron el MST y Nuevo Mas, cuyo discurso central estuvo a cargo del dirigente Alejandro Bodart (MST).
La Comisión Episcopal de Pastoral Social, que encabeza monseñor Jorge Lozano, alertó también acerca de la "creciente desocupación" en el país. "Lamentablemente hoy ni siquiera los trabajadores registrados tienen un ingreso adecuado y unos cuantos siguen debajo de la línea de pobreza", dijo.
El obispo de San Francisco (Córdoba), monseñor Sergio Buenanueva, expresó su solidaridad con las familias "que ven la realidad del trabajo con una sombra de incertidumbre" y se refirió puntualmente a la "compleja y difícil crisis" en la empresa láctea Sancor.
En la localidad bonaerense de Baradero, un grupo de dirigentes encabezados por el ex gobernador de esa provincia Daniel Scioli se apersonó en el acampe que realizan los trabajadores de la empresa Ingredion, que despidió a 200 obreros. De la manifestación participaron representantes de distintos partidos políticos y de más de sesenta gremios.
CGT. El tirunviro Juan Carlos Schmid fue el orador del acto organizado por la central sindical en Obras Sanitarias.