El secretario de Difusión de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Mario Caligari, advirtió ayer que "no está cuestionado el triunvirato y sólo hay diferencias" en la CGT. Y, tras advertir sobre "sectores políticos" interesados en "tironear" de la central obrera, cuestionó que desde el sindicalismo "se intente tomar decisiones" a favor de esos grupos.
En ese marco, Caligari recordó que, si bien la CGT es también comprendida como un ámbito político, "lo que no debe ser es un ámbito partidario".
"Seguramente hay algunos sectores políticos que están interesados en tironear de la CGT y arrimar agua para su molino", consideró el sindicalista.
Además, el dirigente advirtió sobre "compañeros identificados con uno de los hombres que está dentro del Partido Justicialista (PJ) y que, seguramente, intentan volcar todo el tiempo su condición de gremialistas para llevar agua para el molino que representan".
Consultado sobre si se trataba de gremialistas vinculados al massismo, Caligari respondió: "Están claramente identificados, pero no corresponde de parte mía (decir) quiénes son los hombres que están respondiendo a determinado sector político".
"También hay otros sectores que se han lanzado últimamente, algunos identificados con los que se están posicionando últimamente para la carrera electoral. También están los que no se ubican dentro de la línea del PJ", completó.
En ese contexto, el gremialista dijo no cuestionar el apoyo a sectores políticos, pero aclaró: "Lo que veo mal es que se intente tomar decisiones en función y a favor de sectores políticos, porque ese no es el objetivo de la CGT".
El dirigente de la UTA también se refirió a las discusiones que tuvieron lugar en la última reunión del consejo directivo de la CGT, a las que definió como "interesantes".
"Nos costó mucho tiempo estar separados, y hoy que estamos juntos nos cuesta un poquito acomodarnos", admitió el gremialista.
Al respecto, Caligari auguró que, "con el transcurso de los días y las conversaciones, todo volverá al ritmo normal, una conciliación obligatoria".
"No me parece mal cualquier discusión que sea en el marco de la mesa de la CGT, siempre y cuando sean debates del tipo gremial y no personal o de agresiones", reflexionó.
"Nos costó mucho tiempo estar separados. Ahora que estamos juntos, nos cuesta un poquito acomodarnos"