Se trata de Roberto Apullán quien instruía un caso que involucra al titular de la Unidad Regional V del departamento Castellanos. También le sacaron los expedientes por el cobro irregular de horas extras de la Policía y la denuncia por supuesto desvío de fondos un programa barrial de la Municipalidad. Son tres causas con mucho peso político. La orden de correrlo fue del fiscal regional, Carlos Arietti.
El fiscal regional de Santa Fe, Carlos Arietti, le puso un nuevo freno al fiscal Roberto Apullán luego de que el funcionario intentó llevar adelante la audiencia imputativa contra el jefe policial de la Unidad Regional V del departamento Castellanos, Adrián Rodríguez. El mismo se presentó esta mañana en la sede del
Ministerio Público de la Acusación para escuchar los cargos en su contra.
Sin embargo, cuando apenas habían transcurrido dos minutos de las 8.30, ingresó una instrucción de Arietti donde le recordó al fiscal que debía desistir de realizar la imputación ya que se encontraba "ajeno a sus competencias" para continuar con la investigación que involucra a Rodríguez.
Minutos después, entre saludos, el exjefe policial –que prestó servicios en la Unidad Regional I– salió de la Fiscalía junto con su abogado particular, Ramiro Díaz Duarte, sin hablar con la prensa. "Todavía seguimos sin tener acceso a la actuación", explicó por su parte el letrado.
Fue el propio Apullán quien confirmó que la causa contra Rodríguez ya no estaba a su cargo, al igual que la que investiga irregularidades en las horas Ospe (Orden de Servicio Policial Extraordinario) y la que apunta a una denuncia por el presunto desvío de fondos del programa de Iniciativas Comunitarias de parte de la Municipalidad.
Las tres causas son expedientes que tienen en vilo a buena parte del poder político santafesino. Al gobierno provincial, por las las causas que involucran a la Policía en graves irregularidades, que de acuerdo a trascendidos nunca confirmados obligaría incluso a investigar la conducta de altos funcionarios. Y al gobierno municipal, por la denuncia de manejo discrecional de dineros públicos hacia estructuras políticas barriales.
"La asignación de los casos no es una cuestión de los fiscales sino del fiscal regional", explicó el fiscal en la puerta de la sede judicial. Algo desanimado y ante la consulta de si había vivido alguna situación similar, el funcionario sostuvo: "Por lo menos a mí, es la primera vez que me pasa".
"Entiendo, como hace la mayoría de mis colegas, que nosotros recibimos una comunicación de una denuncia de un hecho, frente a eso tratamos de conseguir la mayor cantidad de elementos para confirmar ese hecho; yo hice eso", expresó el funcionario judicial ante la consulta en torno a si creía que había cometido un error en las investigaciones. "Cumplí con mi desempeño", agregó.
"Entiendo, como hace la mayoría de mis colegas, que nosotros recibimos una comunicación de una denuncia de un hecho, frente a eso tratamos de conseguir la mayor cantidad de elementos para confirmar ese hecho; yo hice eso", expresó el funcionario judicial ante la consulta en torno a si creía que había cometido un error en las investigaciones. "Cumplí con mi desempeño", agregó. Por último y al ser consultado si creía que había molestado a alguien con sus investigaciones, Apullán miró a los colegas y se retiró en silencio por calle 1º de Mayo hacia el norte.
"Yo dirijo, coordino y superviso"Tras los dichos de Apullán, el fiscal regional Arietti se presentó en la Fiscalía y brindó una conferencia de prensa para explicar las razones de la separación del fiscal.
En este sentido, argumentó que el alejamiento de Apullán de las tres causas fue porque el organismo judicial reasignó en los últimos días unas 15 mil causas penales que se tramitaban en distintas Fiscalías. De ese número, unas dos mil, incluidas la de Rodríguez, Horas Ospe e Iniciativas Comunitarias del Municipio, fueron remitidas a una nueva área creada: la de Delitos Complejos a cargo de Leandro Lazzarini y Ezequiel Hérnandez.
A su vez, Arietti indicó que el mismo Apullán se encontraba fuera de la investigación desde el 12 de octubre pasado, fecha en la cual iba a ser imputado Rodríguez en la Fiscalía tras la orden de que sea liberado un día antes, cuando iba a tener su paso en tribunales para que se le atribuyan los cargos por los cuales había sido detenido en Rafaela.
Leer más: "No creo haber molestado a nadie", dijo el fiscal separado de la causa del jefe policial de Rafaela "Se incorporaron nuevos fiscales, había que reasignar causas", dijo el mandamás de los fiscales. "Parece algo extraño pero es habitual", expuso. "Yo permanentemente estoy dando órdenes a los fiscales, no es una situación excepcional", se refirió en otro tramo de la conferencia.
"Por supuesto que yo puedo dar instrucciones particulares, es más, la ley dice que yo dirijo, coordino y superviso la labor de los órganos fiscales. Asimismo, si yo advierto un error de un fiscal, tengo el rol de ver y corregirlo", agregó.
"Por supuesto que yo puedo dar instrucciones particulares, es más, la ley dice que yo dirijo, coordino y superviso la labor de los órganos fiscales. Asimismo, si yo advierto un error de un fiscal, tengo el rol de ver y corregirlo", agregó. En torno a qué tipo de causas tiene Rodríguez –de las cuales no trascendieron demasiados detalles desde su detención el pasado 10 de octubre– solo indicó que "tiene varias en curso" y que una de ellas era por una "omisión de denuncia". "Las investigaciones, cuando están en marcha, exigen cierta reserva", recordó en medio de las preguntas y repreguntas de los colegas presentes.
Por su parte y en torno a la detención de Rodríguez en la Unidad Regional V, Arietti sostuvo que esa mañana conoció la noticia porque el fiscal Apullán le avisó por un mensaje de WhatsApp y que cuando intentó contactarse con su subordinado no logró encontrarlo. "Yo le recomendé otra cosa", indicó.
El caso que fue el disparadorLa detención del comisario Adrián Rodríguez se produjo el pasado 10 de octubre por orden del fiscal Apullán en el marco de una causa que investigaba un cohecho pasivo. Tras ser esposado en la UR V, con sede en Rafaela, Rodríguez fue trasladado a la Unidad Regional I de la capital provincial.
Un día después lo imputaron en tribunales –y de hecho se había fijado una audiencia para las 16.30– pero tras una resolución del fiscal Arietti, Rodríguez fue liberado para transitar el proceso en libertad.
Veinticuatro horas después, el jefe policial debía presentarse en la Fiscalía Regional para ser imputado –ya en estado de libertad– pero no lo hizo ya que fundamentó que no se encontraba en condiciones psicológicas y físicas.
El pasado martes, en horas de la mañana, el defensor de Rodríguez, Ramiro Díaz Duarte, presentó un escrito donde puso a disposición de la Justicia a su defendido. Ayer por la tarde fue notificado de que en la jornada de hoy se iba a realizar la imputación.
Esta mañana, a las 8.30, Rodríguez y su abogado se hicieron presentes en el MPA. Dos minutos después, se desencadenó el escándalo judicial.