El diputado provincial y presidente del PRO en Santa Fe, Federico Angelini, replicó ayer la acusación de presunto "clientelismo" lanzada un día antes por la intendenta Mónica Fein al afirmar que "al socialismo le molesta profundamente que la Nación esté presente en los barrios de la ciudad atendiendo demandas de vecinos que en los últimos años fueron olvidados por el municipio". A su vez, habitantes del denominado Cordón Ayacucho, epicentro de la denuncia pública del Frente Progresista (FPCyS), apuntaron al oficialismo rosarino por la supuesta utilización política de imágenes que reflejaron sus viviendas y la ayuda recibida de parte de la administración macrista, que —aseguraron— fue gestionada casi un año atrás, después de una inundación.
"Lo que la intendenta llama asistencialismo para nosotros es cercanía y brindar respuestas a necesidades primarias", afirmó Angelini, quien agregó: "Para Fein representa un problema que el Ministerio de Desarrollo Social nacional ayude a un barrio de Rosario. Sin embargo, en Cambiemos proponemos que todos los niveles del Estado trabajen a la par para llegar de mejor manera a los ciudadanos. Esa debería ser la forma natural de hacer las cosas, más que un inconveniente".
Paralelamente, el candidato a concejal Roy López Molina advirtió que el Frente Progresista busca "confundir asistencialismo con presencia del Estado". Y resaltó que el oficialismo pretende, con "denuncias infundadas y poco serias, no hablar de los temas que de verdad preocupan a los rosarinos".
Tanto Fein como la candidata a concejala Verónica Irízar (FPCyS) había señalado a Cambiemos por "maniobras de clientelismo político" en Rosario de cara a las elecciones generales del 22 de octubre próximo. En ese sentido, aludieron (y acompañaron con fotografías) a la "entrega de chapas y colchones" a familias de la zona sur de la ciudad.
Por su parte, Laura Peralta, quien vive en Ayacucho entre Uriburu y Ameghino, señaló a La Capital: "El 14 de noviembre de 2016 nos inundamos en el barrio. Después, una asistente de Desarrollo Social de la Nación tomó nota de lo que necesitábamos unas diez personas y en estos días nos llegó la ayuda".
Posiblemente la distancia entre la petición de los vecinos y la fecha del arribo de los colchones y otros elementos, cercana a la fecha de elecciones, haya despertado las suspicacias de la administración frentista.
No obstante, Peralta hizo hincapié en el malestar que le provocó la supuesta utilización política de su caso. "Vinieron y sacaron dos fotos, una de ellas adentro de mi casa, y luego la intendenta denunció cosas que no eran así. Me dolió", recordó.
En esa línea, la vecina agregó: "Dieron a conocer fotos que no tenían nada que ver con lo que denunciaron Fein y su gente. Hubiesen averiguado bien lo que estaba ocurriendo en el barrio, porque acá somos gente trabajadora y terminamos usados para las elecciones".
Si bien reconoció que existe una presencia del municipio en el barrio, la mujer advirtió que "no hay derecho de escrachar gente pobre sin saber cómo fueron los casos" en los que los vecinos recibieron la asistencia, en esta oportunidad, de la Nación.
Asimismo, Angelini lamentó que "tantos años de gobierno hayan puesto a los dirigentes del socialismo en una posición tan soberbia de criticar todo lo que se hace desde afuera de su gestión como si fuera algo malo, aunque resulte en beneficio de los vecinos".
"Rosario no es una quinta del socialismo. Semejante nivel de mezquindad nos preocupa, aunque no sorprende. De no haber sido así estarían denunciando que las ayudas no llegaron", concluyó el legislador.