Una banda dedicada a la venta de drogas de diseño fue desbaratada y sus principales integrantes detenidos en el marco de una serie de allanamientos que realizó una brigada de la Policía Federal en la capital provincial y en la vecina localidad de Santo Tomé. En el procedimiento se secuestraron más de 100 pastillas sintéticas y 250 mil pesos en efectivo.
Ayer, pasadas las 11 de la mañana, más de diez oficiales y suboficiales de la Policía Federal con colaboración de la División Antinarcóticos de la Aduana Nacional, realizaron cinco allanamientos en la ciudad de Santa Fe y uno en Santo Tomé en el marco de una investigación encaminada por Diego Amarante, titular del Juzgado Penal Económico Nº 5 de los Tribunales Federales con asiento en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Uno de los allanamientos se desarrolló en San José al 2000, en el humilde barrio Alfonso de la capital santafesina; y tres en avenida Freyre al 3200, en la zona sur de la ciudad. Respecto a estos últimos, fuentes de la investigación aclararon que tuvieron resultado negativo debido a que las personas investigadas ya no residían en el lugar y la nueva familia que alquila la vivienda no tiene nada que ver con la causa. El otro allanamiento se registró en Lisandro de la Torre al 1400 de Santo Tomé.
De acuerdo a la información oficial, en el inmueble de barrio Alfonso se secuestraron un centenar de pastillas de éxtasis, varios teléfonos celulares, elementos de informática y una suma cercana a los 250 mil pesos. Allí fueron apresados los integrantes de la gavilla quienes no opusieron resistencia al momento de caer los efectivos policiales a la vivienda.
La cantidad de pastillas encontradas y la gran cantidad de dinero se deberían a que los involucrados, según un análisis de una fuente policial ligada a la investigación, habrían vendido la mayor parte de la "mercadería" en una tradicional e histórica fiesta de disfraces que se realizó el fin de semana en Paraná.
En principio hay tres jóvenes detenidos y el juez federal con asiento en Santa Fe, Reinaldo Rodríguez, ordenó el traslado de los imputados a Buenos Aires debido a que la investigación fue supervisada y dirigida por el juzgado radicado en Capital Federal.
El valor de venta de cada pastilla al mercado ronda entre los 350 y 400 pesos por lo cual el secuestro de estupefacientes alcanza una suma cercana a los 40 mil pesos que los técnicos de Aduana sumaron al dinero encontrado en efectivo.
Dentro de lo que fueron las requisas generalizadas que se hicieron en cada ambiente de la media docena de inmuebles allanados no se encontraron armas de fuego pero si material de computación como planillas y registros de ventas.