Una investigación de varios meses realizada por la policía de la provincia tendiente a desarticular una banda dedicada a la comercialización y distribución de drogas en la localidad de Capitán Bermúdez desembocó ayer en un operativo en el populoso barrio Copello de esa ciudad, donde se realizaron 13 allanamientos en viviendas señaladas como puntos de venta de estupefacientes o quioscos. En el procedimiento se detuvo a cinco hombres y una mujer a quien se sindica como la principal distribuidora de la zona. Además se secuestraron armas y envoltorios de marihuana y cocaína preparadas para su venta.
Varias dotaciones de la Dirección General de Prevención y Control de Adicciones de Santa Fe (ex Drogas Peligrosas) coparon ayer muy temprano las calles del humilde barrio Copello, que se extiende al oeste de la avenida Manuel Belgrano al 200 de Capitán Bermúdez, es decir a unas 10 cuadras de la ruta 11 y en dirección a la autopista Rosario-Santa Fe.
El procedimiento, según fuentes policiales, fue el resultado de una investigación de más de un año en la cual se detectó la actividad de una decena de bocas de expendio de drogas algunas de las cuales, incluso, ya habían sido allanadas en 2015, pero volvieron a reinstalarse para continuar con el negocio.
Así las cosas, a solicitud de la Fiscalía Federal Nº 3 y con orden del juez Marcelo Bailaque, los agentes irrumpieron en al menos diez casas, algunas muy precarias, ubicadas en el radio comprendido por las calles Bahía Blanca, 27 de Febrero, Suecia, Guillermo Brown y avenida de los Granaderos.
Diez viviendas
Entre las anotaciones con las que llegaron al barrio los investigadores figuraba un dato puntual: que una mujer (pareja de un hombre que está detenido por varios hechos delictivos y cuya identidad no trascendió) había quedado como encargada de la distribución de los estupefacientes en el barrio.
Los diez domicilios requisados estaba dispersos en apenas cuatro cuadras de calle Bahía Blanca, desde el 200 al final de la numeración, y en 200 metros a la redonda, en la esquina de Suecia y Brown, 27 de Febrero sin número y Brown al 200, en los cuales se detuvo a cinco hombres y una mujer.
Poco peso
Las personas fueron identificadas como Joel F., de 21 años, al que se le secuestró un trozo compacto de marihuana y uno de cocaína; Manuel M., de 34 años, quien tenía en su poder cocaína, marihuana, un celular y un revolver calibre 32; Horacio R., de 35 años, que guardaba trozos compactos de cocaína y marihuana; José R., de 22 años, también con marihuana, cocaína y dos celulares en su poder; y Nicolás M., de 22 años, que tenía una pistola Bersa calibre 22 con diez proyectiles. Hasta anoche, el peso total de la droga secuestrada no había sido difundido por los pesquisas.
Además, en una vivienda ubicada al final de calle Bahía Blanca, propiedad que por sus características edilicias los voceros policiales describieron como que sobresalía del resto por su solidez en los materiales, se detuvo a Joana R., de 29 años, la mujer sospechada de ser la principal distribuidora de droga en ese sector bermudense.
"Llegamos a ese lugar porque teníamos datos de que funcionaban por lo menos diez kioscos y bocas de expendio de estupefacientes", aportó una fuente cercana al procedimiento, y aclaró que el negocio lo manejaba un hombre que está preso y sería pareja de Joana. Al ser detenida, la mujer no tenía droga en su poder pero se le secuestraron 10 mil pesos en efectivo que serían producto del negocio ilegal.
Desde la Fiscalía Regional indicaron que en la sede de esa repartición en San Lorenzo se le formarán causa a Nicolás M. por la tenencia de la pistola Bersa y del mismo modo que se procederá con Manuel M. por la pistola 32, mientras el resto de los apresados tendrán causas en la Justicia federal.