Una muchacha de 25 años que vive en Victoria narró la pesadilla que le tocó vivir en un viaje en taxi desde la ciudad entrerriana hasta Rosario, cuando el hombre que la acompañaba con la excusa de conseguirle un trabajo comenzó a acosarla, amenazarla y hasta maltratarla físicamente, impidéndole descender del automóvil. Incluso deslizó sus sospechas de que el hombre, de unos 60 años, haya estado vinculado con la trata de personas: "Me invitó a Paraguay y me dijo que me sacaba el pasaporte para ir a Europa".
Nair Aguirre, de 25 años, dijo que se ayer encontró con un amigo en Victoria y le comentó que tenía "mucha ilusión de venir a trabajar a Rosario".
"En una esquina, en Victoria, lo crucé al Negro Coria, Aldo Adrián Coria, que es mi amigo, o era mi amigo", narró al comentar todo el episodio. "Le dije que iba a ir a Rosario a tirar un par de currículums y me dijo: «Estás hablando con la persona indicada». Estaba con un tipo, bien presentable, leyendo un libro", indicó.
"Me dijo: «Aprovechá el viaje, porque nosotros nos quedamos para ir al casino y mañana a la mañana vamos, él tiene una reunión, es un tipo de mucha plata, muchas empresas, es contador»", contó, y añadió que esta mañana su amigo tuvo un desperfecto en su camioneta y no podía llevarlos. "Me dijo: «Tomate un taxi con este tipo», pero yo no quería ir con alguien que no conozco. Me dijo: «Andá con este tipo, tenés comida, tenés entrevista, tenés trabajo, ¿sabés cuánto te quiere pagar por ser la secretaria? Dos mil dólares por mes»", recordó.
La muchacha contó que el supuesto empresario comenzó a hablar en el camino a Rosario y a llamar por teléfono, y hasta incluso se quedó sin batería y le pidió a la chica el teléfono prestado. "Llamó a empresas, a abogados... me hizo el cuento", resumió.
"Llegamos a una estación de servicio en Francia y Santa Fe, que me dijo que era de él, pero empecé a notar cosas como que no tenía plata. «Acá hay algo que no me cierra, yo me voy», le dije, y entonces me agarró del brazo, me arañó, me agarró del otro brazo, y me dijo: «Vos no te vas a ningún lado, quedás detenida por averiguación de antecedentes»", indicó.
También contó que el hombre la "acosaba todo el tiempo. Me decía «amor», me tocaba la pierna, me decía que me iba a meter presa, que me iba a hundir, «tus hijos van a aparecer adentro de una zanja», me decía en voz baja".
"Agarré una lapicera y le dije que se la iba clavar en el ojo, y los chicos de la estación de servicio me dijeron que habían llamado a la policía, que el tipo está loco, que ahí mismo debe plata", remarcó la víctima.
Consultada sobre si considera que el individuo podría estar implicado en casos de trata de personas, la muchacha dijo: "Puede ser, porque me invitó a un viaje a Paraguay mañana o pasado. «Te saco el pasaporte en cinco minutos, en diciembre nos vamos a Europa», me dijo".
"El héroe que me salvó fue el taxista, que se quedó todo el tiempo, hasta el final", resaltó, ya que además el supuesto empresario quería llevarla a una casa "a la vuelta, al bulín que tiene".
La Policía arribó de inmediato a la estación de servicio y detuvo al hombre, que quedó alojado en la comisaría 6ª.