A las 11.38, Marco Torsiglieri tuvo el primer contacto con el mundo canalla. Fue el momento en el que llegó al sanatorio Mapaci para realizar la primera parte de la revisión médica. Lo hizo acompañado de Ariel Kiperszmid, uno de sus representantes. Minutos antes ya había arribado Hernán Diez, médico del plantel auriazul, para ultimar los detalles. Y mientras el defensor mantenía un mano a mano con Ovación, después de prestarse gentilmente a la sesión de fotos, arribó el directivo Eduardo Bossio, el primer dirigente en tomar contacto con el primer refuerzo de Central. "En lo personal va a ser un lindo desafío", tiró el futbolista, quien se mostró entusiasmado, pese al "cansancio" al que hizo referencia porque hacía algo más de 11 horas que había llegado al país (arribó a las 12 de ayer a Ezeiza), proveniente de México. Por la tarde firmó el contrato por tres años.
"Estoy muy contento de estar acá, pero fundamentalmente de que el club se haya fijado en mí y que me dé la confianza de jugar, además de la confianza del técnico. Me pusieron ya al tanto del proyecto del club y de las aspiraciones del equipo, así que estoy muy contento con eso", fue la primera reflexión de Torsiglieri en la charla con este diario sobre calle Oroño, donde varios hinchas canallas se pararon para ver de cerca a uno de los nuevos soldados del Chacho Coudet.
—Coudet es de hablar mucho con los jugadores que pretende como refuerzo, ¿cuántas veces te llamó?
—Uf, fueron muchas. Es más, gran parte de que yo esté acá en Central tuvo que ver con eso. Después fue muy importante en mi decisión la forma de jugar del equipo, al que viéndolo desde México me gustó mucho. Tengo entendido que la intención del club es armar un equipo para pelear el torneo y eso también jugó un papel importante.
—¿Cómo tomás el retorno al fútbol argentino?
—Bien. En Morelia ya me habían informado que no iba a seguir y estaba esta posibilidad de Central que me gustó mucho. Al fútbol argentino vuelvo con muchas ganas y que sea para jugar en una institución como Central me motiva más todavía, por lo que es el club y por sus hinchas. En lo personal va a ser un lindo desafío.
—¿Qué te llamó la atención de Central estando en Boca y estos últimos meses en México?
—Me gustó siempre la forma de jugar. Central es un equipo con vocación ofensiva, que ejerce una presión muy alta y en lo que respecta a mi posición, jugar adelantado, casi mano a mano, es algo que me gusta. Por eso lo del desafío. Además está lo que es Rosario, el ambiente que se vive y de hecho ya varios compañeros me hablaron de eso.
—¿Y va a ser muy especial jugar en una ciudad tan futbolera como esta?
—Me tocó estar en Córdoba, con Talleres, pero todo el mundo me dice que acá se siente mucho más la presión, pero es algo que me gusta. Trataré de disfrutarlo después de trabajar con mis compañeros y ganarme un lugar.
—¿El paso por Boca te puede dar un plus?
—Jugué en varios clubes, pero Boca es un mundo aparte, en el que la presión es muy grande, pero acá supongo que será similar y habrá que acostumbrarse lo más rápido posible. El jugador convive con esa presión, pero hoy lo más importante para mí es conocer rápido a mis compañeros y agarrar ritmo cuanto antes.
—¿Y en ese sentido, desde lo físico y futbolístico, como estás, teniendo en cuenta que en pocos días se juega por Copa Argentina?
—Estuve entrenando en México y lógicamente que me puede faltar algo de ritmo con la pelota, pero es algo que iré adquiriendo con el correr de los días. Igualmente físicamente estoy bien, pero con ganas de ponerme a las órdenes del técnico y conocer a mis compañeros. w
El deseo de tener a Tobio otra vez al lado
Marco Torsiglieri todavía no se había sumado al grupo para entrenar y ya le estaba dando una mano a Coudet para el armado del equipo. Es que el defensor proveniente de Morelia de México estaba al tanto del interés del Chacho por Fernando Tobio, hoy en Boca, pero cuyo pase pertenece a Palmeiras. Y ambos futbolistas tienen una relación de hace mucho tiempo, "de chiquitos", según confió.
"Con Fernando nos conocemos desde muy chicos porque hicimos infantiles, inferiores y jugamos juntos en primera en Vélez. Ojalá que venga", dijo Torsigliri, quien se sinceró: "Ya le estuve escribiendo para me haga compañía".
—¿Le insististe mucho ya?
—Y, estamos en eso, ja. Más allá de eso creo que es un gran jugador y demostró en todos los clubes en los que estuvo que no le pesa ninguna camiseta. Esperemos que pueda sumarse a este gran grupo que se está armando.
—En ese grupo al que haces referencia está el Kity Cristian Villagra, con quien ya compartiste equipo en Ucrania.
—Algo hablamos, ya que jugamos juntos en Metalist. Me habló mucho del grupo y creo que hay buena gente para hacer grandes cosas.