Hay puteadas y puteadas. Y la de Lionel Messi no es cualquiera. Valga como prueba la catarata de opiniones que inundó ayer la prensa en torno a la pena que la Fifa le propinó al capitán de la selección. Leo insultó sin medias tintas a un árbitro asistente del cotejo en que Argentina le ganó a Chile y provocó casi más revuelo que con sus golazos. Sobre el hecho se dijo de todo: que la sanción estuvo bien aplicada, que la pena es exagerada, que la Fifa busca una medida ejemplar para mostrarse creíble, que todo es culpa del fútbol chileno, que es una venganza histórica del fútbol brasileño a través del árbitro, que a la Fifa no le gustan las actuales autoridades de AFA y toma represalias, que Maradona tuvo que ver, que no, que fue culpa de Tinelli.
Lo cierto es que por decisión de la Fifa, que actuó de oficio, la Pulga no jugó ayer contra Bolivia (Argentina perdió 2 a 0), pero tampoco jugará contra Uruguay, Venezuela ni contra Perú, en las eliminatorias para Rusia 2018.
Entre tanto comentario, Ovación le pidió opinión a un ex árbitro internacional, el rosarino Saúl Laverni. "De la forma en que se aplicó, esta sanción es poco habitual, desprolija y poco profesional por parte del árbitro auxiliar. Es una sanción que deja muy mal parado al arbitraje, porque el comité actúa por encima del árbitro", dijo el actual integrante de la Comisión Arbitral de AFA.
¿Está al tanto AFA de lo que dijo el árbitro brasileño Sandro Ricci en el informe?
Sí, pero quiero aclarar algunas cosas. El árbitro del partido es portugués y ese no es un idioma oficial de Fifa (lo son el español, el inglés, el italiano, el francés y el alemán). Por lo tanto el informe lo hizo en los vestuarios a través de un traductor, un auxiliar técnico de AFA. El informe se lee en castellano y nada dice de que Messi hubiera insultado al asistente del árbitro durante el partido. Messi no estaba en el informe. Luego la comisión disciplinaria actuó de oficio y fueron a un video y a una nota del diario La Nación.
Tanto la sanción como la intervención de la comisión, ¿son reglamentarias?
Sí, la sanción por insultar a un árbitro va de 3 a 6 fechas. Y en cuanto a la acción de la comisión disciplinaria: puede actuar de oficio, lo que no es habitual es que no haya habido tarjeta. Cuando Neymar pegó un cabezazo contra Colombia y se quedó sin Copa América le sacaron roja y le dieron cuatro fechas. Pero acá no hubo ni tarjeta ni informe.
Otro ejemplo de actuación de oficio es el episodio de la mordida del uruguayo Luis Suárez al italiano Giorgio Chiellini durante el cruce de ambas selecciones.
Claro, pero el árbitro no lo vio y luego se actuó por las imágenes televisivas. En cambio, acá Messi lo insultó en la cara al auxiliar, quien tuvo una reacción poco profesional. Debió haberle informado inmediatamente al árbitro de la acción de Messi y el árbitro entonces debió penarlo con la roja.
¿Usted se hubiera atrevido a sancionar al número uno?
Claro que sí. Para mi lo más grave de esta sanción desprolija es que deja muy mal parado al arbitraje, porque el comité actúa por encima del árbitro. El juez también podría ser sancionado por recibir un insulto en su propia cara y no hacer nada.
¿De uno a diez, cómo evaluaría el arbitraje de ese partido?
Un mal arbitraje, le pondría un tres.
¿Cree que esta sanción a Messi influyó en la derrota que sufrió Argentina frente a Bolivia?
No, no es por Messi que se perdió, para mí es por jugar en La Paz a 3.650 metros de altura.
Usted ya no es referi pero integra la comisión arbitral de AFA, ¿Cuál es su función allí?
Dejé de arbitrar el año pasado tras doce años de referato en primera. Ahora mi función junto a la de Horacio Elizondo y Angel Sánchez es la de capacitar y designar a los árbitros del fútbol argentino.
Y en todos esos años de profesión, ¿recuerda algún otro caso de este tenor?
La verdad es que no, porque hasta la sanción de (Carlos) Tevez también por insultar al árbitro tuvo características distintas (el año pasado Germán Delfino lo expulsó en el partido contra Belgrano y tuvo que cumplir tres fechas). En esa ocasión el árbitro giró inmediatamente y lo echó.
Más allá de lo reglamentario, ¿cree que hubo alguna motivación política detrás de esta sanción?
Creo que Fifa, que viene de cosechar una imagen decadente, quiere cambiar su imagen a nivel internacional y qué mejor acción para esto que meterse con Messi, un jugador tan representativo a nivel mundial.
¿Qué opinión le merece la hipótesis de que a Fifa no le gustan los nuevos dirigentes como Tapia o Angelici?
Es difícil tener certezas de eso. Acá se ve y se lee un insulto claramente.
¿Que quede fuera la Pulga es tan sensible para el futbolero argentino como la salida de Maradona del Mundial de Estados Unidos en 1994?
No, es distinto. Quiero creer que hubo un sorteo fiel y le tocó a Maradona. Acá no se puede ocultar nada: Messi insultó en la cara al árbitro y la sanción que se aplicó es correcta.