A veces las historias se entrecruzan y los protagonistas van y vienen como en un cuento. La final del Torneo del Interior A entre Los Tarcos y Jockey Club es un buen ejemplo, ya que actores del pasado vuelven a serlo en el presente. Pasó más de una década para que el verdiblanco volviera a meterse en la final de este certamen. La última vez que lo consiguió fue en septiembre de 2002, cuando tras disputarla se consagró campeón al vencer a Universitario de Tucumán 32-28. De hecho esa fue la última vuelta olímpica del verdiblanco, ya que luego entró en un período de sequía de títulos que aún no logra cortar. Ahora tras vapulear a Cardenales en las Cuatro Hectáreas con un categórico 62-26 volvió a conseguir un lugar en el partido decisivo de este torneo y, paradójicamente, dirimirá el cetro con otro equipo tucumano: Los Tarcos, partido que se jugará el próximo fin de semana en el Jardín de la República.
En 2002 uno de los entrenadores del equipo verdiblanco era Rodrigo Crexell (los otros eran Jorge Trevisán y Pedro Baraldi), quien este año volvió a hacerse cargo de la primera división dándole un matiz distinto al juego que venía desarrollando el conjunto de Fisherton. En cancha, entre otros, también estuvieron Facundo Lluch, el hoy también entrenador del equipo, quien esa noche ingresó por Joaquín Bosco; Alejo Fradua y Alberto Di Bernardo. Tanto el centro como el capitán son los únicos sobrevivientes que estarán en el césped entre los quince que jueguen el domingo.
Volviendo al partido decisivo, el historial con Los Tarcos es parejísimo, con dos victorias por equipo en cuatro encuentros. Con el título en juego, el resultado del fin de semana romperá la paridad entre ambos e inclinará la balanza. A priori será nuevamente un choque de estilos, a la vieja usanza.
La primera vez que se vieron la caras en este torneo fue el 19 de septiembre de 1998, en la primera edición del certamen organizado por la UAR. Ese encuentro se jugó en las Cuatro Hectáreas y el triunfo fue para el verdiblanco por un claro 34-19. Más allá de lo que señale el marcador fue un partido muy picante, que se caracterizó por un sinnúmero de roces y escaramuzas y el verdiblanco inclinó la balanza a su favor jugando al rugby, moviendo la pelota fiel a lo que era su estilo y al que hoy en día quiere implementar.
El primer tiempo, en el que el local tuvo viento en contra, terminó 12-15 pero en el complemento Jockey dio vuelta la historia y estiró las diferencias "apelando al criterio de Rodrigo Crexell para distribuir el juego con el pie y encajonarlo en la última línea de Los Tarcos", como señaló La Capital al día siguiente. Esa tarde Jockey formó con Ezequiel Jurado; Nicolás D'Angelo (Agustín Amelong), Alejo Fradua, Agustín Pozzo y Javier Stein; Rodrigo Crexell y Fernando del Castillo; Alfonso Amuchástegui, Pedro Baraldi y Luciano Galimberti (Rafael Sugasti); Martín Palou e Iñaki Barrandeguy; Ciro Castagnino, Mariano Raimondi (Diego Silvetti) y Facundo Lluch.
Seis años después, el 9 de octubre de 2004, Los Tarcos recibió por primera y única vez a Jockey Club (la segunda será el domingo) y fue un verdaderos choque de estilos: el local con mucha marca y preeminencia del juego de forwards y la visita apostando a un rugby abierto y dinámico. Fue un partido parejo, pero Los Tarcos sacó mayor provecho del maul y el scrum y finalmente logró imponerse por 22-15.
En 2009, Jockey tuvo una campaña bastante irregular. No jugó por el título y tampoco por conservar la plaza. En esa zona media se midió con Los Tarcos el 31 de octubre y se impuso por un claro 38-19 en las Cuatro Hectáreas.
El último partido de referencia entre ambos por este certamen se jugó el 17 de septiembre de 2011, también en Fisherton. En la presentación de ambos en el torneo, Jockey sufrió un duro revés al caer en las Cuatro Hectáreas por un inapelable 40-13.
"Más allá de que no jugó bien y que en algunos aspectos mostró hasta un cierto retroceso, el error más grande que cometió el verdiblanco fue meterse en el juego propuesto por los tucumanos, en el corto, donde sabido es que los norteños son expertos. Jockey intentó jugarle ahí de igual a igual pero nunca le encontró la vuelta al partido. Así los forwards tucumanos marcaron la diferencia y se llevaron el partido", como sentenció la prensa local.