Logaritmo y Duendes se pusieron al día ayer, disputando en Ibarlucea el partido pendiente de la 5º fecha del Torneo Regional del Litoral 70 Aniversario del Club Logaritmo - 120 años del Banco Municipal de Rosario, postergado en su momento por el lamentable deceso de Joaquín López, integrante del plantel superior del verdinegro. El triunfo fue para la visita por un categórico 37-19 (5-0), resultado que le permitió al equipo del Fantasma quedar en soledad en la tabla de posiciones con 42 puntos.
Anoche hubo un choque de realidades diferentes. Por un lado estaba Duendes, que llegó a la cita ya clasificado y que por eso presentó un mix entre jugadores de primera y reserva para darle más fogueo a estos últimos, y por otro estaba Logaritmo, que llegó con la necesidad de ganar para subir algunos escalones y estar más cerca de los equipos que disputarán la zona Campeonato.
La cancha pesada producto de las últimas lluvias, el viento y el frío fueron factores externos que también influyeron en el desarrollo del partido disputado en la gélida noche. En ese contexto pudo verse un partido entretenido, donde el dueño de casa puso en jaque al verdinegro en el primer parcial pero terminó sucumbiendo ante la inteligencia y el oficio de un plantel que nunca se entrega.
Al minuto de juego, Duendes llegó fácilmente al try, lo que le auguraba al defensor del título una noche tranquila. Pero tras la conquista fue Logaritmo el que tomó el protagonismo y con una buena tarea de sus forwards empezó a dominar la escena.
Con el correr de los minutos todo se hizo muy parejo hasta que a la media hora Logaritmo pegó el primer golpe con el try de Pablo Córdoba. Con esa conquista, el conjunto matemático tomó confianza y se animó a más, aprovechando el desconcierto de la visita que no podía salir de su asombro. Loga parecía un relojito y cuando atacaba no perdonaba. Así llegaron los tries de Julián González y de Manuel Catán, que pusieron cifras definitivas al primer parcial.
En el complemento la cosa fue distinta. Duendes ajustó la marca y se adueñó de la pelota. Si bien las acciones fueron muy disputadas, el verdinegro estuvo más fino, cometió menos errores y fue más incisivo al atacar (Emiliano Narvaja, intratable), al punto tal de que sumó 27 puntos para dar vuelta la historia y transformar en victoria una derrota que parecía decretada al final del primer tiempo.