Si de objetivos se trata, Walter Montoya no anduvo con chiquitas. "Ahora tenemos que salir campeones", tiró el chaqueño sin tapujos. Advirtiendo que habrá un arranque de competencia que será clave, pero que hay un arrastre de buenos rendimientos y un claro protagonismo en los últimos torneos, que no coincidieron, claro, con el objetivo de máxima planteado en su debido momento. Hoy la sensación es que toda la carne debe ir al asador y no guardarse nada. "Ya no hay más vara alta. Ahora tenemos que salir campeones y para eso nos estamos preparando y trabajando a full. En lo personal estoy muy entusiasmado con eso". Contundente lo del volante.
Tantas veces se habla del cultivo del bajo perfil que cuando aparecen frases del tenor de las que vertió Montoya la sorpresa se hace evidente. No está ni mal ni bien. No se es un inconsciente cuando se hace referencia de manera tan clara al objetivo de máxima, como tampoco se es un tibio a la hora de abrazarse a la mesura.
Como siempre, el contexto cuenta. En esta ocasión tal vez haga más a la cuestión que muchas otras veces. ¿Importa la llegada de un jugador del calibre de Teófilo Gutiérrez? Claro que importa. Pero esa sensación del ahora sí o sí que expuso Montoya tiene más que ver, se supone, con las muy buenas campañas realizadas por el equipo en los últimos torneos.
Para Montoya, y muchos otros, debe contar el recuerdo de la Copa Argentina perdida a manos de Huracán, con Miguel Angel Russo como entrenador (en ese encuentro el volante no participó, aunque sí formaba parte del plantel). También el torneo 2015 en el que las chances del título se esfumaron en cancha de Banfield, a dos jornadas del final, cuando el Chacho se vio obligado a guardar nombres por otra posibilidad que está ahí, al alcance de la mano: la tan recordada final de la Copa Argentina contra Boca. Hasta podría incluirse en ese recorrido histórico al campeonato pasado, en el que arrancó como una tromba, pero que terminó peor de lo imaginado porque en el medio estaba el desafío copero de la Libertadores, con el equipo instalado entre los ocho mejores de Sudamérica.
Tal vez por eso el volante por derecha haya dejado en claro la sensación de conocer que "la vara está alta, pero a esa vara la pusimos nosotros", y sostuvo: "Ahora tenemos que ir por todo de verdad".
Lo que planteó Montoya es algo así como un juego interdisciplinario entre el pasado, ni más ni menos que lo anteriormente mencionado, y el futuro, que es donde verdaderamente se apunta. ¿Y el presente? De eso también parece aferrarse el chaqueño. Ahí es donde encaja la idea de que "vinieron grandes jugadores y otra vez hay un gran plantel, lo que para nosotros es buenísimo".
Hasta la situación personal por la que le tocó atravesar hace apenas unos meses, cuando fue tentado por varios clubes y decidió continuar en Arroyito, entrega claros indicios de formar parte de su razonamiento. "Yo estoy convencido de que tenemos que pelear y para eso me quedé, porque hubiese sido fácil decir chau, irme y quedarme con los bolsillos llenos. Pero me quedé para salir campeón, no para otra cosa. Es lo que vamos a tratar de hacer y para lo que estamos trabajando. Creemos que el arranque va a ser fundamental porque nos va a marcar si tenemos con qué salir campeones o si lo que estoy diciendo es nada más que para satisfacer a la gente".
Qué más se puede agregar a tan firme declaración.
Quizá algo más de contexto, en el que aparecen de manera intrínseca, casi sin realizar un exhaustivo ejercicio de memoria, aquellas palabras de Teo Gutiérrez el día que fue presentado como refuerzo, cuando a la hora de hablar de los objetivos que lo habían motivado a venir a Central habló de la "seguridad" de que "vamos a dar la vuelta".
Igual lo de Montoya sonó muy a título personal, de allí la consulta sobre si era algo que sólo él sentía o formaba parte de las conversaciones diarias en el vestuario. "Lo digo a título personal, pero a todos los chicos que escuché cuando tuvieron la posibilidad de hablar dijeron lo mismo. No es que todos los días en el vestuario hablamos de que tenemos que salir campeones porque todos lo sabemos", cerró el chaqueño.
"Ahora que me vengan a buscar de Manchester"
"Que en su momento me hayan buscado River o desde México me alegró mucho porque quiere decir que venía haciendo un buen trabajo. De ahora en más no sé, que me venga a buscar Manchester", dijo Montoya entre risas, no sin dejar en claro que la apuesta a futuro, en relación a una posible transferencia, sería el fútbol extranjero.