Su paso por Central en la década del 80 no fue el esperado para el hincha auriazul. Pero para Germán Martellotto fue una gran experiencia y vivencia haber transitado por nuestra ciudad. "Si tengo que decir qué rescato de mi estadía en Central es que me dio mucho más a mí que yo al club", afirmó el Tato con tonada cordobesa antes de meterse de lleno en el motivo real por el cual fue contactado por Ovación, que no es otra cosa que el partido que ofrecerá esta noche la semifinal de la Copa Argentina, en esta calurosa y calma Formosa, entre dos de sus ex equipos. A la vez, el ex enganche no dudó en ponerle todas las fichas al equipo que comanda el Chacho, "porque es intenso, agresivo y tiene muy buenos jugadores".
¿Qué es de su vida como ex jugador?
Estoy trabajando en mi pueblito natal que se llama Calchín, tiene tres mil habitantes y queda a 110 kilómetros de Córdoba capital. Soy entrenador y trato de volcar lo que fui aprendiendo en cada institución que estuve en beneficio de los chicos. Estoy trabajando y disfrutando a la vez del fútbol se podría decir.
Si bien pasó mucho tiempo, ¿qué le dejó o aportó Central a su carrera?
En realidad, Central me dio más a mí que yo al propio club. Deportivamente no se consiguieron cosas importantes. De hecho nos fuimos al descenso. Pero desde lo personal me aportó muchísimo y me sirvió para afrontar luego mi carrera. Pese a todo fue una linda experiencia haber pasado por Rosario y conocido a un grande como Central.
¿La mejor versión suya se vio cuando Basile lo citó e hizo debutar en la selección nacional en Wembley y encima con la número 10?
Ese partido fue como la frutilla del postre. Porque me convocó el Coco estando en México. Primero me sorprendió su llamado porque nunca habían citado jugadores de ahí, de hecho fui el primero. Y luego cuando me dijo que iba ser titular. Ni hablar cuando vi que me dieron la 10, con toda la historia de ese número porque era de Diego (Maradona), que estaba suspendido. Tomé ese momento como un premio al esfuerzo y la dedicación, pese a que luego Leo Rodríguez se terminó quedando con el puesto de enganche. Un momento inolvidable fue esa gira. Una semana maravillosa.
¿Le quedó pendiente no poder regresar para demostrar su verdadero nivel?
Sí, ni hablar. Me hubiese gustado volver porque me aportó mucho. Pero no se dio por esas cosas del fútbol. No obstante quedé identificado con el club. La gente me transmitió esa pasión que siente. Por eso me pone contento cuando lo veo por televisión. Central pasó unos años duros en el ascenso, con todo lo que representa eso para el hincha, pero ahora vive un buen momento.
¿Y cómo hará ahora, hinchará para alguno en este partido o se abstendrá por haber jugado en los dos equipos?
Tengo sentimientos en los dos lados, pero desde lo futbolístico me identifico más con Central, porque demuestra una idea ofensiva y clara como me gusta a mí.
¿Cómo piensa que se dará el partido?
Imagino a un Central ambicioso y teniendo el dominio de la pelota ante un Belgrano que esperará para ver si puede tener o aprovechar algún espacio para poder lastimar.
¿Hay algún jugador que le llame la atención de Central?
Sí, varios en realidad. Me gusta mucho el chico Lo Celso, el volante Montoya, el lateral Salazar y el goleador Ruben. Aunque lo que más destaco es la propuesta del equipo. Porque juega con una misma idea en cada una de las líneas y eso lo hace diferente, como también lucir a sus jugadores. Central es agresivo e intenso durante los 90 minutos. Y eso hace que sea difícil para sus rivales también.
¿El gusto por Lo Celso es porque juega de enganche como usted?
Por varias cosas. El chico tiene mucha clase. Me gustan esos jugadores, pero más allá de este caso puntual destaco que Central siempre saca muy buenos valores. Incluso, una vez fuimos con Belgrano a jugar en inferiores de AFA y había muchos chicos para resaltar. En ese aspecto trabaja muy bien.
¿Y qué destaca del equipo del Chacho puntalmente?
Casi todo porque es intenso y por momentos muy ordenado en cada una de las líneas. Manda a atacar a los laterales, a los volantes externos y los internos juegan bien además. Es un equipo que te juega igual en todos lados. Tiene muchas variantes en ataque y busca protagonismo de manera permanente. Central tiene eso, si está bien es distinto como su pasional gente.
Hablando de gente, ¿cuál sería el mensaje que le dejaría al hincha que lo vio pero no disfrutó de su buen fútbol?
Sólo les puedo afirmar que fui un privilegiado de haber jugado en Central, que a su vez me ayudó muchísimo a crecer como persona. Guardo los mejores recuerdos de esos momentos y siempre que puedo lo sigo.