Newell's se repitió durante el primer tiempo en la salida, tratando de pasar la línea de volantes con pelotas áreas a espaldas de ellos hasta tres cuartos de cancha, buscando de arriba para que Matos habilite de cabeza a un compañero. Jugada reiterada y poco clara para que surtiera efecto. En una de las contadas ocasiones en la que el rojinegro encontró espacios, generó una contra que nació en Scocco cerca de su área y culminó con el tiro del delantero de frente al arco, encontrando el pie providencial de un rival.
Sarmiento también tuvo la suya. Advíncula permitió que Kevin Mercado hiciera un giro y pateara al primer palo. Pocrnjic, ubicado donde debía, la mando al córner.
La corrida de Amoroso con Dutari encimándolo, tras la habilitación de Matos, y el balón que salió alto fue otra de las escasísimas situaciones de la visita.
En el cierre de la primera etapa, la Lepra perdió el medio y Sarmiento se le aproximó con los centros de Di Renzo desde la derecha. Nada que inquietara. Hasta que Newell's capitalizó una desatención de la defensa local. Tiro libre de Moiraghi desde mitad de cancha al área. Scocco, libre de marcas, la frenó y cuando se le arrimaron enganchó al medio. Después le dio fuerte, abajo, al primer palo: 1-0.
Pero no tuvo tiempo de manejar la diferencia. A los pocos minutos de la segunda etapa, Santana disparó desde afuera, Domínguez la tocó y descolocó a Pocrnjic. Empate y vuelta a empezar.
Isnaldo ya había ingresado luego del descanso en lugar de un improductivo Matos. Variante que no alteró el juego del rojinegro. Es más. La tuvo menos que en el período inicial. Declinaron Quignon y Amoroso, que con buenas y malas al menos habían intentado algo en los primeros 45'. Maxi no pesó y Scocco, ahora de punta definido, rara vez la recibió al pie.
Con limitaciones, Sarmiento se hizo más fuerte en el medio y atacó con centros cruzados, pocos eficaces es cierto. Y cuando preocupó en serio, con Leandro Díaz bajándola de pecho para Busse, el tiro del volante fue interceptado por Pocrnjic que la mandó por sobre el travesaño.
Durante el último cuarto de hora, el equipo de Osella se volvió a encontrar con la pelota, siendo de todos modos igual de inofensivo que casi todo el partido. Al menos logró que no se le acercaran, para conservar la igualdad.