La noche no tuvo un final luminoso como el hincha leproso pedía. El empate en cero con Godoy Cruz sólo alcanzó para que se fueran tranquilos del Coloso, maquinando el pensamiento a futuro con un presente en el que deben ubicarse con expectativas a medias, como justamente califican estos resultados. Claro, Newell's necesitaba más para este momento en el que trata de acomodarse con todo lo que rodea al campo de juego y de a poquito, como pasó con lo de Amoroso, también con el bravo tema de Agremiados, como asoma otra vez la incursión judicial para que los números de la tesorería no se pongan otra vez en rojo (ver página 5), como aquellos de comienzos de la temporada futbolística anterior en la tabla del promedio que preocupaba y que gracias a aquella campaña cambiaron de color hasta salir adelante.
Como parece querer salir este equipo de Llop. Al principio lo demostró más en la intención, ahora se ve algo más en el juego, le falta sumar el resultado. Esa victoria que en el segundo tiempo le quedó lejos ante un Godoy Cruz que se ve mejor parado en todo sentido.
El desarrollo del juego leproso no alcanzó anoche el nivel del que mostró en la última presentación en el Parque en ese 2-0 a Olimpo, es que ese día se encontró con un equipo que es menos, no como anoche que tuvo enfrente a un conjunto mendocino que es más, y que venía de vencer a Banfield para dar un paso adelante en la Copa Argentina, en la que precisamente eliminó a Newell's.
Y los de Llop no pudieron tomarse como una "revanchita" a este empate sin goles. Es más, ni el triunfo hubiese alcanzado para que fuera una revancha total porque esto de anoche no incluyó eliminación de ningún estilo.
Empatar no gusta. No alcanza cuando las pretensiones siempre deben ser mayores por lo que significa Newell's al lado de cualquier equipo que hoy aparece a la par o un escalón arriba. Pero deja encendida la luz de que le va a costar pero que podrá enderezar el camino a la vuelta de cualquier fecha. Mientras Llop y sus jugadores deben definir si el camino elegido es el correcto.
Y se habla de elegido porque más allá de que el DT no pudo contar prácticamente con la experiencia de Guevgeozian (hoy ingresó y no tuvo ninguna chance de mostrar su poder de gol, es más vivió adelantado, apurado) y Sarmiento (volvería ante Vélez) por lesiones, también salió al ruedo con varios pibes, sostuvo a Valenzuela, les dio lugar primero a Elías y ahora a Rivero (con su expulsión probablemente cambien de nuevo los papeles frente a los de Liniers, en dos semanas), también a Fértoli pese a que en este partido lo sentó en el banco (después entró en un momento complicado, con uno menos, y jugó con cabeza levantada, que es positivo) y les agregó un par más que se ganaron el puesto en unas apariciones sorprendentes: Joaquín Torres y Enzo Cabrera.
Y siempre se sostiene que a los pibes hay que esperarlos, sobre todo cuando no están bien rodeados de experimentados. Aunque ahora tienen la ventaja de que están bien sostenidos por los experimentados del fondo, como Bianchi, como Leyes, por nombrar a los más firmes. Como Pocrnjic, que volvió a mantener el arco en cero con un par de intervenciones en momentos clave.
Empató Newell's. Suena a poco. Pero el análisis tranquilo marcará que no fue malo el punto.