Central hizo su negocio. Manejó la pelota, le imprimió dinámica a su juego, se posicionó en campo rival y presionó alto. Cumplió con su repertorio y consiguió: se impuso como visitante sobre Temperley por 2-1 y estiró su racha positiva. Pero lo cierto es que sufrió para quedarse con los tres puntos. Principalmente porque no aprovechó las chances que generó, y terminó aguantando el partido ante un rival al que lo acecha el fantasma del descenso.
El mediocampista Washington Camacho abrió el marcador a los 14', el delantero Mauro Guevgeozián consiguió el empate a los 66' y Marco Ruben puso el 2-1 a los 71'. Con esta ecuación el canalla consiguió sumar 13 de los últimos 15 puntos que disputó.
El equipo de Montero hizo un monólogo durante gran parte del partido. Llegó con peligro cierto una y otra vez, pero no estuvo fino a la hora de definir. Y lo padeció. Porque cuando perdió el control de la pelota el Gasolero lo puso en jaque. Pero apareció Ruben para patear el tablero y devolverle la ventaja a su equipo, que debió defender la victoria con uñas y dientes hasta el último minuto.
El canalla salió a la cancha con decisión. De arranque intentó hacerse de la pelota y jugar en terreno rival. Y lo logró, aunque sin conseguir demasiada profundidad. Igualmente no hubo que esperar demasiado para que los de Montero generen situación de peligro. Tuvo una aproximación en los primeros minutos, y a los 7' el arquero Matías Ibáñez salvó la caída de su arco tras un tiro libre, desvío mediante, del mediocampista Mauricio Martínez.
Y un puñado de minutos más tarde Central trasladó su supremacía al tanteador. Recuperó la pelota presionando alto, tras una gran jugada colectiva el mediocampista Washington Camacho abrió el marcador a los 14' tras conectar un centro filtrado de José Luis Fernández.
Central no se conformó con la ventaja. Fue por más. A los 25' el delantero Teófilo Gutiérrez tuvo una gran chance de gol en su botín derecho, pero falló en la definición. Y un minuto más tarde el defensor José Leguizamón sacó un violento remate desde afuera del área que pasó muy cerca del palo derecho de Ibáñez.
A los 29' el Gasolero respondió con un tiro libre, pero el arquero Diego Rodríguez desactivó el peligro del remate arrojándose hacia su derecha.
Un minuto después el canalla volvió a generar una oportunidad clara de gol. Esta vez el delantero Marco Ruben picó la pelota dentro del área y la pelota cayó sobre el techo del arco local.
Así bajó el telón la primera mitad. Con Central yendo hacia adelante y generando chances ciertas de estirar la ventaja, pero sin suerte a la hora de dar la estocada final.
En el inicio de la segunda mitad el tenor del partido fue el mismo. Con el canalla como protagonista y con Temperley agazapado esperando golpear de contragolpe.
Pero con el correr de los minutos el trámite del partido cambio. El equipo de Montero perdió el control de la pelota y el Gasolero comenzó a crecer y a merodear el arco del Ruso Rodríguez.
El uno canalla salvó el arco canalla en la primera aproximación de peligro cierto del local. Pero en la segunda no tuvo nada que hacer. A los 66' el delantero Mauro Guevgeozián se encontró la pelota de frente al arco y definió con un Rodríguez prácticamente vencido.
Era el mejor momento de Temperley. Central había perdido el rumbo y mostraba una imagen deslucida. Pero no bajó los brazos. Y unos minutos después apareció el goleado Marco Ruben. El defensor Leguizamón le bajó la pelota dentro del área, y el capitán canalla le devolvió la ventaja a su equipo con un remate rasante a los 71'.
Otra vez con la ventaja en el bolsillo el canalla se dispuso a defender con dientes apretados. Se hizo un equipo corto y aguantó los embates del Gasolero, que necesita sumar imperiosamente para salir de los puestos de descenso.
Tras algunos sobresaltos, la moneda cayó para el lado de Central, que confirmó su buen momento tras meterse en el bolsillo 13 de los últimos puntos que consiguió. Así avanzó un casillero importante pensando en su objetivo de clasificarse a las copas internacionales.