No es una semana más en el campamento rojinegro. Siempre una derrota posclásico genera replanteos, necesidad de revancha rápida y la obligación de hacer un trabajo psicológico con el plantel para levantar la moral y seguir adelante a pesar del porrazo con el archirrival. Newell's hoy tiene dos realidades totalmente contrastantes. Por un lado viene de sufrir dos derrotas seguidas en el Coloso, una dura goleada 2-4 ante Independiente y luego el mazazo que significó la caída 1-3 ante Central. Estos resultados tranquilamente desde el sentido común dirían que los rojinegros ya no están para ilusionarse con el título. Pero la realidad matemática de la tabla indica que ocurre todo lo contrario. La Lepra está a apenas cuatro unidades del líder Boca, al que visitará el domingo, a las 18.15, en la Bombonera y de conseguir un resultado positivo mantendrá intacta la chance de dar batalla hasta las últimas consecuencias. Dicho esto, hay que anticipar que Diego Osella evalúa realizar cambios nominales "importantes" para la excursión a territorio xeneize. Si bien la semana recién arranca y hay muchos entrenamientos por delante, no sorprenderá si el DT leproso mete un volantazo táctico para encarar la recta final del certamen.