Pereyra y la gambeta de Becker o Lovera.
Por Rodolfo Parody
Pereyra y la gambeta de Becker o Lovera.
Tan pocas eran las situaciones del encuentro que una de ellas fue por una desatención de la visita. Tiro libre rápido que se ejecutó a espaldas de Nahuel Gómez, Valenzuela metió el centro abajo y Tissera se arrojó al piso y la tiró afuera a escasos metros del arco ante el achique de Jeremías Ledesma. Todo el público local se lamentó.
La misma pena tuvo la parcialidad leprosa unos minutos después. El equipo rojinegro la recuperó en el medio y Tissera metió el pase para Treppo, a espaldas de Nicolás Giménez. El atacante la dominó, se fue solo, pero Ledesma le ahogó el grito de gol.
La situación se volvió compleja para Central a partir de la expulsión de Martinich sobre el final del primer tiempo. Tuvo que reacomodarse. Tomás Zanotti entró por Pereyra para marcar punta derecha y Gómez se corrió al sector opuesto, para mantener los cuatro en el fondo. Y Lovera, hasta que estuvo en cancha, y luego Malcon Pilone se preocuparon por ocupar la franja derecha para interrumpir los avances rojinegros por ese sector.
Hicieron lo mejor que pudieron. Que no resultó suficiente. Por ese lateral fue por donde Newell's desarrolló lo mejor en la segunda etapa, con las permanentes trepadas de Valenzuela. Claro que la fórmula fue repetida y por lo tanto perdió sorpresa. Vojvoda no demoró demasiado en ese período en sacar al volante central Maxi Ribero para buscar desborde con el ingreso de Héctor Fértoli. Pero no hubo caso. Las pocas aproximaciones fueron centros que terminaron en un seguro Ledesma.
La acción solitaria de Becker con un remate cruzado que pasó cerca del arco de Unsain fue la única alerta de Central, cuyo principal objetivo fue no descuidarse del medio hacia atrás. Entre esa postura y la del conjunto rojinegro, más ambicioso aunque irresoluto, fue transcurriendo un juego anodino.
El zapatazo de Lionel Monzón desde afuera del área que pasó cerca casi altera el marcador en tiempo de descuento cuando ya todos cantaban el empate. Hubiese cambiado el resultado y las chances de uno y otro para la vuelta. Pero no entró y la serie tiene final abierto. Los pibes tendrán su revancha. Y los hinchas que esperan algo más de ellos, también.
Sin discusión la expulsión y la conquista anulada
Si bien hubo cierta fricción y alguna pierna fuerte, las polémicas estuvieron ausentes. Más allá de los reclamos que se esperaban, la expulsión de Marcos Martinich fue correcta, lo mismo que el gol que le anularon a Nahuel Gómez por una posición adelantada.
La acción que incidió en el juego sucedió a los 44' del primer tiempo. Martinich fue a disputar una pelota sobre el costado con Lionel Monzón. Ambos jugadores disputaron con fuerza el balón, que terminó saliendo por la línea de fondo canalla. De inmediato, Martinich levantó el brazo, giró bruscamente e impactó con la mano en el rostro de Monzón.
Mientras el lateral derecho local permanecía en el piso, el árbitro Trucco se llevó la mano al bolsillo y le mostró la tarjeta roja al futbolista canalla. Hubo intentos de reproche, pero nada para discutir sobre la sanción.
La otra intervención del juez que fue correcta ocurrió en el segundo tiempo, en una pelota que terminó dentro del arco de Unsain.
Nicolás Giménez entró por detrás de toda la defensa rojinegra y la bajó al medio del área, donde se encontraba Gómez, que la metió junto al palo izquierdo. Los jugadores lo gritaron pero el árbitro, a instancias del juez de línea Gustavo Rossi, lo invalidó por posición adelantada. Tanto en esa acción como en la expulsión, Trucco no falló.
Los de "primera", en el nivel del resto
Si bien se trató de un enfrentamiento entre conjuntos que apostaron por la reserva, participaron algunos que ya experimentaron en primera (sin contar a los que debutaron en los octavos de la Copa Santa Fe), aunque sea unos minutos. Por el lado de Newell's, Unsain, Fértoli y Elías. Y por el de Central, Pereyra, Lovera, Banega y Ezequiel Rodríguez. Ninguno fue determinante en el juego.
A Unsain le tocó jugar los 90'. De los siete mencionados es el de más recorrido en primera. Casi no lo exigieron y poco pudo demostrar. Tampoco lo hizo Fértoli en los más de 35' que estuvo. No desequilibró como es capaz de hacer. En cuanto a Elías, no contó con chances de nada porque entró en el descuento.
En Central, Pereyra y Banega mostraron pasajes aceptables con otros intrascendentes en el medio, en tanto Lovera procuró darle peso al ataque, aunque rara vez pudo. Los tres fueron titulares, a diferencia del Tanque Rodríguez, que jugó poco tiempo y sin ninguna incidencia.