El presidente Mauricio Macri afirmó ayer ante empresarios y medios periodísticos en España que "no se sale del populismo de un día para el otro, es un proceso de depuración" al lanzar nuevas críticas al gobierno que lo precedió y confió en que "Argentina cambió" y confió en que este año volverá el crecimiento al país.
El presidente formuló esas declaraciones al disertar ayer en el foro "Invertir en Argentina", organizado por el diario El País y el Grupo Prisa, en el marco de su visita de Estado a España.
"No es que las dificultades acabaron, pero ahora dejamos de lado la intolerancia y ponemos la verdad sobre la mesa", remarcó el presidente según informó el periódico español que también destacó que ante consultas específicas sobre el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, Macri afirmó que "hay que darle tiempo" porque "es un hombre de mucho olfato...que quiere encontrar un lugar nuevo del que negociar".
No obstante, según la misma información, Macri aludió también a la "preocupación" que hay "en el mundo acerca del futuro del empleo", situación que advirtió: "lleva a muchos miedos y eso hace que se tomen posiciones extremas. Pero, el problema no es la globalización, es la revolución electrónica. Y no se puede parar como no se paró la revolución industrial. Hay que adaptarse", remarcó el presidente.
Macri también se refirió a la situación política en Venezuela, que consideró "el proceso es dramático. El que expresa algo distinto va preso, es una locura" y no descartó impulsar la aplicación de la carta democrática en la OEA: "Nosotros hicimos enorme tarea suspendiendo a Venezuela de Mercosur. Era un mensaje. Si el mensaje de aplicar la carta democrática en la OEA suma hagámoslo, pero hay que conseguir los votos", finalizó Macri según destacó el diario El País.
A propósito de la intervención de Macri en el seminario que organizó ayer el Grupo Prisa, el diario El País resumió en su página web la sensación de "dudas" sobre la posibilidad de que futuros gobiernos mantengan la "línea" de cambio que expresó el presidente argentino en su paso por España y garantías sobre la gobernabilidad en un año electoral.
Macri sostuvo: "Muchos me preguntan por qué esta vez la Argentina no va a volver a sorprendernos negativamente. Hay que entender el proceso. No es algo que inventé yo. Los argentinos dijeron basta de engañarnos, de echar la culpa al mundo de lo que pasa, del papel de víctimas, del nacionalismo autocompasivo. La gente dijo tenemos capacidad, desarrollémoslo".
Esas mismas dudas admitió la canciller argentina Susana Malcorra que recibieron con Macri el pasado miércoles ante el Parlamento español, ante lo que el presidente reclamó "que traigan inversiones" porque su gestión mantendrá "reglas de juego claras".
En el foro donde Macri recibió el premio "Nueva Economía y Cohesión Social" también expusieron cuatro ministros argentinos: Francisco Cabrera, de Producción; Andrés Ibarra, de Modernización; Susana Malcorra, de Relaciones Exteriores y Culto, y Jorge Triaca, de Trabajo, Empleo y Seguridad Social.
Por España lo hicieron los ministros españoles Alfonso Dastis, de Exteriores, y Luis de Guindos, de Economía, Industria y Competitividad.
Malcorra aseguró: "Hay una fuerte complicidad con España. Hablo de «complicidad» porque traduce algo que va más allá de la formalidad de los acuerdos que se firmen —que los hemos firmado y mucho— para que podamos avanzar en esta agenda de forma coordinada".
Para regresar de Madrid tras su gira por España, el presidente Mauricio Macri volará por primera vez en Aerolíneas Argentinas desde su asunción al frente de la Casa Rosada.
En sus anteriores salidas al exterior, el titular de la Casa Rosada había optado por vuelos privados o por líneas aéreas extranjeras.