No por nada es una gran capitana. Y no es un elogio de ocasión. Sus compañeras la reconocen como tal. Siempre que hubo que hablar, Macarena Rodríguez habló. Y también accionó. En este sentido, la mendocina que hoy lleva la cinta de River y hasta hace poco llevaba la de Las Leonas, se refirió al papel que juega Buenos Aires en la Liga Nacional de Clubes. Hace una semana, Maca se consagró con las Vikingas en su Mendoza natal, revalidando el título del año pasado. No sin antes pasar por unas peripecias que podrían haberse evitado. A ello, al polémico formato de la Liga y a cómo ve a Las Leonas de cara a los Juegos Olímpicos, se refirió la mediocampista surgida deportivamente en Andino: "Es hora de que los dirigentes salgan de atrás de un escritorio y realmente hagan cosas para que el hockey crezca, no para que vayamos para atrás", tiró. Y remarcó la "soberbia de Buenos Aires" y la invitación indirecta para que los clubes no jueguen la Liga, el torneo más importante para el resto de las provincias.
—Sorprendieron en Mendoza con el apoyo al hockey del interior. Tras cada partido se sacaron una foto apoyando a la Liga Nacional, ninguneada por los clubes de Buenos Aires. ¿Por qué fue?
—Nos pasó que ya estábamos allá para jugar la Liga (del jueves al domingo pasado) cuando nos enteramos que la Asociación de Hockey de Buenos Aires (AHBA) en su comunicado nos puso los partidos de recupero en el mismo momento en que teníamos que competir en Mendoza. Habíamos pedido adelantar partidos por este torneo, los clubes a los que se los pedimos nos dijeron que no y se presentaron notas, pedidos e hicieron oídos sordos. Después nos enteramos de esto. Y nos dolió porque tuvimos que dividir el equipo. Gracias a Dios tenemos un plantel grande y pudimos estar en los dos lugares al mismo tiempo (en Mendoza en la Liga y en Buenos Aires jugando el Metropolitano), pero también estábamos disminuidas en los dos lugares. Y nos parece que es una falta de respeto no sólo para los jugadores sino también para la gente del interior. Este torneo es uno de los mejores que tiene el país y la gente para jugar pone mucho de su bolsillo, cuesta mucho ir a participar. Lo que pasó es una vergüenza, porque desde Buenos Aires así te están diciendo que no participes.
—Básicamente lo de River fue un fuerte reclamo.
—Es para que de una vez por todas se dejen de estar atrás de un escritorio y que realmente hagan cosas para que el hockey crezca, no para que vayamos para atrás. Este torneo le hace bien a las provincias, que participen los mejores equipos del país, hace bien a todos, el hockey se nivela. Haciendo estas cosas de soberbio no sirve. Y lo que nos pasó era algo que podía resolver de otra manera.
—Algunos lo piensan. Otros lo dicen: a los clubes de Buenos Aires no les interesa jugar la Liga Nacional. ¿Qué opinión te merece siendo capitana de un equipo que sí la prioriza?
—Pienso que es por soberbios. Nosotras jugamos porque queremos crecer, creemos que hoy por hoy River tiene un plantel con el cual puede competir a nivel Metropolitano y eso hace que podamos participar en la Liga Nacional, porque sabemos que podemos mejorar el torneo nacional también. No es de creídas, la mayoría en River somos chicas del interior que sabemos lo que cuesta participar, conocemos los dos lados y la verdad es que jugar la Liga para nosotras es un orgullo.
—La Liga este año trajo mucha polémica. Además, la temporada se inició con un reglamento que decía que salvo el campeón, descendían todos dos categorías. Un día antes del torneo se supo que sólo descenderían cuatro.
—Un papelón. Creo que desde arriba hacen todo mal, no planifican como se debería. Empezás jugando un torneo con un reglamento, a mitad de camino se cambia, todavía no se sabe que va a pasar con la B (quedó inconclusa por mal tiempo y los equipos no saben si descendieron o ascendieron). Buenos Aires y la Confederación Argentina (la Liga corresponde a ella) hoy están dirigidos por las mismas personas. ¿Cómo no se pueden poner de acuerdo y unificar calendario y que no coincidan Liga y torneos locales? No, hacen todo al revés. Metamos la Liga acá, qué importa. Además, los jugadores que están afectados a un seleccionado nacional no pueden venir porque están a menos de un mes de jugar los Juegos Olímpicos. Ya desde el vamos la Liga está manoseada, les interesan muy poco los jugadores, los clubes. Vuelvo a decirlo: la gente del interior pone mucho de su bolsillo para participar y que Buenos Aires haga esto...
—¿Seguís a Las Leonas de cerca? ¿Con qué perspectivas las ves de cara a los Juegos Olímpicos?
—¡Sí, obviamente! Las veo muy bien, es un equipo joven que está tratando de buscar su identidad, creo que las chicas tratan de demostrar que solas pueden. Este será el primer Juego sin Lucha Aymar y el después de Luciana es difícil para las que quedan, tienen esa mochila de la desconfianza de que no van a ganar, eso cuesta y en los últimos torneos demostraron que pueden y mucho. A veces le digo a Gaby (Minadeo, el DT), porque tengo llegada, que debemos animarnos a jugar más, hoy jugamos a sacarnos rápido de encima la pelota, que le vaya a las delanteras porque sabemos que adelante hacemos lío, somos buenas. Pero todavía está ese miedo de jugar con las volantes y es cuestión de animarse, todas las volantes tienen mano, hay que jugar y tratar de hacer un juego que tenga identidad.
—Hace un año no encontraban el rumbo en la Liga Mundial de Valencia, hoy son campeonas de esa misma Liga y de Champions Trophy. ¿Pensaste que la recuperación llegaría tan rápido?
—El problema era otro: era la conducción, la dirigencia, muchos cambios, eso quieras o no afecta e impacta. Y había problemas de fondo de los que teníamos que hacernos cargo las jugadoras. Y los que tenían que dirigir no tomaban la batuta ni se hacían cargo de su parte. Hoy gracias a Dios está más ordenado, un cuerpo técnico que contiene a esas jugadoras y eso hace que el equipo se preocupe solamente por jugar. Las veo como candidatas, claro. Ojalá nos puedan dar esa medalla que nos falta.