El acercamiento entre el gobierno nacional y el campo tuvo un nuevo capítulo. Las cuatro cadenas de comercialización de granos —Acsoja, Asagir, Argentrigo y Maizar— se reunieron con el ministro de Agricultura, Carlos Casamiquela, y le expresaron sus preocupaciones sobre el sector.
El planteo realizado por los presidentes de Acsoja, Miguel Calvo; de Asagir, Luis Arias; de Argentrigo, Matías Ferreccio; y de Maizar, Gastón Fernández Palma, tuvo que ver con las "dificultades" para obtener "una rentabilidad razonable", el cuestionamiento a la arbitrariedad de los Roes y la excesiva presión impositiva sobre el sector.
Desde el Ministerio de Agricultura expresaron que durante la reunión "Casamiquela remarcó que la clave para discutir proyectos comunes es la interacción público-privada" y se subrayó como una "prioridad" de su gestión la línea de análisis con las distintas cadenas.
Asimismo, el titular de la cartera agropecuaria destacó que se van a "mantener abiertos todos los canales de diálogo", al tiempo que enfatizó que se busca "regionalizar la discusión de las políticas en todo el país, para continuar profundizando las estrategias en los territorios".
En la reunión con Casamiquela, el sector le pidió analizar "la devolución del saldo IVA que exhibe un atraso pendiente y que conforma un limitante al capital de trabajo".
Además, los directivos le manifestaron su preocupación por el "incremento que sufren los precios internos, que para el productor son fuertemente significativos". Asimismo, las cadenas aseguraron que los mercados a término son una herramienta que "hoy están amenazados por las exigencias para operar".
Por otra parte, la mesa de enlace también salió a escena esta semana. Las entidades ruralistas presentaron un informe sobre la potencialidad del campo que fue elaborado por técnicos de las entidades junto con los de Aacrea y Aapresid.
Mesa de enlace. En un encuentro que contó con la participación de políticos del arco opositor se brindaron detalles del informe que destaca que "el sector agropecuario argentino es el responsable del 60 por ciento de las exportaciones y del 45 por ciento de la recaudación tributaria nacional". También se señala en el estudio que el sector está integrado por 276.000 establecimiento familiares y genera servicios y productos para alimentar a la población y para abastecer a numerosas industrias procesadoras, que incluyen la de biocombustibles. Además, se advierte que genera trabajo en todo el territorio y constituye un componente de gran importancia para el desarrollo del país.
En el trabajo se indica, también, que en las últimas décadas el sector venía creciendo a tasas constantes, pero en los últimos años se ha estancado. Pero más allá de la situación actual, diversas fuentes nacionales e internacionales proyectan un fuerte crecimiento del sector agropecuario argentino para los próximos siete años. Las estimaciones de producción de granos indican que en 2020 se podrían alcanzar de 124,1 a 157,7 millones de toneladas. A su vez, la producción de carne bovina podría llegar a 3-3,8 millones de toneladas, la producción de carne aviar podría subir a 2, 4 millones de toneladas y la producción lechera ascendería a 14,1-18,3 millones de litros.
"La producción adicional calculada permitiría generar más divisas, más productores, más proveedores más empleados rurales, más técnicos, más desarrollo local, mayor arraigo y mayor dinamización de la economía nacional", se subrayó.
Más soja. Otra de las noticias de la semana tuvo que ver con un nuveo informe del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (Usda). La dependencia estatal advirtió que la producción de soja de Argentina sería de 54,5 millones de toneladas en la temporada 2013/14, cuya siembra está en marcha, por encima de los 53,5 millones de toneladas estimados anteriormente.
A su vez, el Usda dejó sin cambios sus estimaciones para la producción argentina de maíz y de trigo 13/14, en 26 millones y 11 millones de toneladas, respectivamente.
Por otra parte, el último Panorama Agrícola Semanal (PAS) de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires da cuenta de que los productores de la región pampeana retoman las tareas de siembra de maíz en la búsqueda de concretar su planteo agronómico y en el país la caída del área es de un 10 por ciento, con un 47,4 por ciento de hectáreas sembradas de las 3.3 millones previstas.
Por su parte, la Guía Estratégica del Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) respecto de la zona núcleo consignó que "el norte bonaerense fue notablemente afectado por los intensos vientos y hubo daños en el follaje de los cultivos y algunos lotes fueron alcanzados por la caída de granizo".
En tanto, el Sistema de Estimaciones Agrícolas de la Bolsa de Comercio de Santa Fe estimó que el rendimiento de la campaña de trigo 2013 fue de 17 quintales por hectárea, con una producción de 233.925 toneladas. Sembradas 148.500 hectáreas, 13.500 más que en la campaña anterior, se cosecharon 137.000 hectáreas, 7.000 más con una producción que fue de 233.925 toneladas. Si bien se sembró y cosechó más que en 2012, los rindes fueron de bajos a malos y menor la producción final, aclara el trabajo.