"Hay que dejar de bastardear la palabra planes sociales" La ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, es uno de los pocos funcionarios del macrismo que tiene buena llegada con los movimientos sociales, muchos de ellos con simpatía ideológica con el kirchnerismo. Ayer, ante lo más granado del empresariado argentino, les hizo una sugerencia que sonó a reclamo. "Hay que dejar de bastardear la palabra planes sociales", dijo.
"No sigamos bastardeando la palabra planes, tenemos que garantizarles ese ingreso", enfatizó la ministra en su disertación en el panel sobre Integración Social, en el marco del Coloquio de Idea.
Con estilo directo y frontal, Stanley encaró a los CEOs top y dejó sentada su posición sobre su presencia en el foro: "No vine acá a pedirles plata sino a que se comprometan con el otro. Si se animan pueden, por ejemplo, apadrinar un espacio de primera infancia".
En un ambiente proclive a desdeñar el asistencialismo y su consiguiente costo fiscal, Stanley defendió la política oficial de mantener los planes sociales y los programas que se empezaron a implementar en el gobierno anterior. "No se puede jugar con la gente, que se asustó y pensó que no iban a tener ese mínimo ingreso que se merecen", dijo.
Stanley precisó que el crecimiento económico es importante y necesario, pero que con sólo eso no alcanza. A la vez, pidió diferenciar a los referentes sociales con los punteros políticos.
"El puntero es la persona que de la manera más egoísta trata de sacar una ventaja de un plan, pero también en ese universo hay referentes y personas que hacen algo por los otros", diferenció la ministra.
La exposición de Stanley merodeó en todo momento la cifra del 32 por ciento de pobreza que hace dos semanas difundió el Indec. "Necesitamos integrar e incluir a este tercio de personas que están en la pobreza. Tenemos una situación de emergencia que atender y la primera manera de hacerlo es que aquellas personas que no tienen un trabajo digno reciban recursos del Estado", argumentó.
Luego de detallar la política oficial en asistencia social, Stanley les pidió a los empresarios "compromiso" para luchar junto al Estado contra la pobreza y por la integración. Fue en ese momento en que los miró y les dijo que no estaba en el foro de Idea para "pedirles plata, sino para pedirles que se comprometan" con el objetivo de la creación de empleo.
Stanley, al igual que los demás funcionarios del gobierno que desfilan por Idea, recalcó la necesidad de que los empresarios hagan el esfuerzo por invertir. Ese parece ser el ruego y el logo macrista a la "crema" empresarial que pagó hasta 50 mil pesos para ser parte del evento anual de Mar del Plata.