Al suizo Henry Dunant, un hombre de negocios, se debe la fundación en Suiza de la Cruz Roja en el año 1863. Lo inspiró el trágico resultado de la "batalla de Solferino" (norte de Italia), protagonizada por los ejércitos de Piamonte, Austria y Francia. El panorama al anochecer de ese 24 de junio de 1859 lo ensombreció, ya que miles de soldados de los tres bandos habían quedado heridos y librados a su suerte. Dunant, con espíritu solidario, pidió ayuda a los pobladores cercanos para socorrer a los heridos sin tener en cuenta a qué ejército pertenecían. A partir de allí germinó en su alma la noble idea de crear una organización internacional para auxiliar a los soldados víctimas de confrontaciones bélicas; idea que cuatro años después culminó con lo que se llamó: Comité Internacional de la Cruz Roja. Se trataba de una organización independiente y neutral, sin inclinaciones políticas y animada sólo por la altruista intención de ayudar a las víctimas de conflictos armados, accidentes y desastres naturales. En el transcurso de la primera guerra mundial, en 1918 la Cruz Roja hizo un llamamiento a las naciones beligerantes para que dejaran de usar armas biológicas; esa inquietud derivó en junio de 1925 y en Ginebra, en la firma del Protocolo contra la utilización de armas bactereológicas. La Cruz Roja se hace presente asimismo, donde la naturaleza golpea impiadosamente con sus terremotos, inundaciones, tsunamis, deslizamientos, tornados y erupciones volcánicas; como también en los accidentes provocados por el hombre, tales como choques, derrames de combustible, incendios y explosiones. Para evitar toda connotación religiosa, se adoptó como símbolo universal a la bandera de Suiza pero con los colores invertidos, ya que esa bandera tiene una cruz blanca sobre fondo rojo. Sin embargo, en 1929 hubo que crear la Medialuna Roja, para no herir la susceptibilidad de los soldados musulmanes. De igual manera, en 2005 debió adoptarse el Cristal Rojo, otro emblema oficial que satisfacía a los israelíes. En resumen; tres íconos para un solo objetivo: la solidaridad. En nuestro país, la Cruz Roja Argentina fue creada el 10 de junio de 1880 por iniciativa de los doctores Guillermo Rawson y Toribio Ayerza; pero antes de su fundación oficial, ya había intervenido en la Guerra de la Triple Alianza, y durante las epidemias de fiebre amarilla y de cólera. Actualmente cuenta con 63 filiales en el territorio nacional. Dado que felizmente Argentina no tiene conflictos bélicos, la Cruz Roja centra su tarea humanitaria en cataclismos naturales o accidentes diversos. Y brinda además el servicio de teleasistencia, destinado a personas mayores que pueden pedir ayuda desde sus domicilios en cualquier momento los 365 días del año. Desde la fundación de la Cruz Roja Internacional hasta el presente muchas guerras se han sucedido, sin que la paz mundial haya podido consolidarse en el mundo. Por eso, la benemérita institución deberá proseguir interviniendo allí donde la sinrazón humana, siga estableciendo acciones bélicas.