A ocho días de que la ley de descanso dominical entre en vigencia en Rosario, la medida sigue generando conflictos y empieza a dividir las aguas entre las grandes cadenas de supermercados. Ayer, el Ministerio de Trabajo de la provincia dictó la conciliación obligatoria con el objetivo de retrotraer 131 despidos que habían efectivizado las grandes cadenas nacionales (Coto, Carrefour, Jumbo y Libertad), pero sólo Carrefour acató la medida y reincorporó a 55 empleados.
La negativa del resto de las cadenas a reincorporar a los trabajadores fue confirmada a pocas horas de terminada la audiencia de conciliación en el edificio de Ovidio Lagos y San Lorenzo por el presidente de la Asociación de Supermercados Unidos (ASU), Juan Vasco Martínez.
Por su parte, el secretario gremial de la Asociación Empleados de Comercio, Juan Gómez, indicó que estarán a la espera de ver qué sucede hoy, cuando los trabajadores quieran reincorporarse a sus puestos, y señaló que "serán las autoridades ministeriales las que deban constatar el incumplimiento".
Con 131 telegramas de despido de las cadenas Coto, Carrefour, Libertad y Jumbo entregados desde el miércoles, y tras un intento fallido de encuentro entre las partes el mismo jueves, la audiencia en la sede de Trabajo se llevó adelante sobre el mediodía. Allí, tanto el gremio como los supermercados no hicieron más que ratificar posiciones.
El dirigente de Empleados de Comercio insistió en que "los argumentos de los empresarios no tienen sustento" y que no puede haber "despidos preventivos"; mientras que los abogados de las cadenas de supermercados ratificaron los telegramas "ante la inminente aplicación de la ley de descanso dominical".
Si bien el presidente de la ASU intentó poner en la mesa de discusión la aplicación de la normativa aprobada por la Legislatura provincial y ratificada por el Concejo Municipal, el gremio rechazó el planteo por "no ser el ámbito para discutir la medida".
En ese marco, los representantes del Ministerio de Trabajo explicaron que "si bien la ley no se puede obviar, éste no es el ámbito para debatir sus bondades", y consideraron cuanto menos "apresurada" la reacción de los empresarios. Así, definieron la conciliación obligatoria por los próximos 15 días hábiles, lo que extendería la medida hasta el 15 de julio próximo, y citaron a una nueva audiencia para el 11 de julio.
Rechazo. Si bien dejaron el edificio de Ovidio Lagos y San Lorenzo sin hacer consideraciones, los abogados de las cadenas de supermercados y el titular de ASU anunciaron pocas horas más tarde en el Hotel Rostower que no acatarían las medida, incluso pese a las onerosas sanciones previstas por el ministerio.
"Lo analizamos y se ha decidido no acatar la conciliación", dijo Vasco Martínez, y recalcó que los despedidos "no serán reincorporados a sus puestos de trabajo" como indica la medida.
Esa posición no fue avalada por los responsables de la cadena Carrefour, quienes se diferenciaron de lo dispuesto por la ASU y acataron la conciliación obligatoria.
En la vereda de enfrente, Vasco Martínez ratificó los despidos. "El sustento de la decisión es el mismo que venimos planteando y reiterando desde hace años, y es que la ley de descanso dominical es una norma absolutamente ilegítima en la medida que es flagrantemente inconstitucional", aseguró el representante de las cadenas, y responsabilizó a "la cerrazón política" por empujarlos a tomar la medida.
Sobre la posibilidad de sanciones por parte del Ministerio de Trabajo, Vasco Martínez consideró que "eso queda en manos del ministerio".
Por su parte, los dirigentes gremiales mercantiles plantearon ayer que esperarán que el no acatamiento se constate a primera hora de hoy, cuando los empleados despedidos deban volver a sus puestos de trabajo. "Por ahora no vamos a hacer nada y esperaremos a ver el incumplimiento", indicó Gómez, y advirtió que "es ahora el Ministerio de Trabajo el que deberá constatar qué suceda".