La Región Centro, con 8,4 millones de habitantes concentra el 20 por ciento de la población del país. Dentro de este guarismo, la mayoría de los ciudadanos vive en zonas rurales de menos de 5 mil habitantes. Es el sector argentino, aseguran los expertos, con más exposición a factores de riesgo que golpean tanto a la salud como al medio ambiente. Con ese escenario, investigadores de las seis universidades nacionales de la región (de Rosario, el Litoral, Córdoba, Río Cuarto, Villa María y Entre Ríos) pondrán en marcha una red interuniversitaria en ambiente y salud, que se propone avanzar desde un abordaje transdisciplinario en investigaciones en el territorio que permitan aportar al diseño de políticas públicas, pero sin dejar de lado la docencia y las tareas de extensión.
Rosario y la UNR serán mañana el ámbito de la presentación de esta nueva red de trabajo a través de un seminario en la sede de Gobierno de la casa de estudios, en Maipú 1065 (ver aparte).
A la hora de argumentar la génesis de este proyecto académico, Alejandro Oliva, médico e investigador, y responsable del Programa de Medio Ambiente y Salud del Centro de Estudios Interdisciplinarios de la UNR, enumera los factores de riesgo que conviven estas ciudades y comunas.
"Hay agua con arsénico, acueductos naturales contaminados; es una de la zonas más deforestadas en los últimos 30 año, con un modelo productivo instalado y una anarquía de tendidos eléctricos de alta y media tensión que atraviesan las comunas; todo esto convierte al sector como el más impactado", indica Oliva, que lleva años realizando investigaciones en epidemiología que abordan esa relación entre agentes contaminantes y salud.
Uno a uno. Al desglosar los elementos citados, el modelo productivo aparece en el centro de la escena. "Es la zona del país con mayor exposición a agroquímicos y no me refiero sólo al glifosato, sino a los detergentes que se agregan a esos productos y que son más agresivos, y los componentes ya prohibidos que siguen estando presentes en esas fórmulas", indica el médico.
A eso se suman aguas con altos niveles de arsénico en el oeste de Santa Fe y el este de Córdoba, que son consumidas por el 80 por ciento de la población; además de dos acueductos naturales, Pampeano y Puelche, contaminados con arsénico, nitratos y nitritos.
"La región concentra el 70 por ciento de los feedlot del país que, a través de la orina de los animales contaminan, las napas de agua de nitratos y nitritos, la misma agua que consumen las poblaciones", detalla Oliva; y recalca que en Entre Ríos son los feedlot de pollos los que se suman como factor de riesgo.
Como si fuera poco, sólo Córdoba y Santa Fe, perdieron en las últimas tres décadas el 70 por ciento de sus bosques nativos, y las poblaciones están atravesadas por un anárquico tendido aéreo de redes de alta y media tensión, que las impactan.
Transdisciplinar. Más allá de la experiencia que Medio Ambiente y Salud desarrolla desde la UNR, la propuesta de la red, junto a otras cinco universidades nacionales, se propone un abordaje más amplio. "No sólo pensamos en la representatividad de la zona, sino sobre todo en que sea transdiciplinar, y que todas las áreas tengan un espacio y especialistas", recalca Oliva.
Así, los investigadores de la Universidad de Córdoba vienen trabajando sobre la biodiversidad y sus pares de Villa María llevan adelante desde hace un tiempo investigaciones sobre lo que se llama "cultura ambiental", que no es más que los hábitos y actitudes comunitarias frente a las problemáticas de medio ambiente y salud.
Esa pata del proyecto es para el investigador rosarino, "fundamental", y asegura que "al fin y al cabo, siempre son las poblaciones movilizadas las que transforman la realidad, y eso se vio tanto en ciudades como Ituzaingó, en Córdoba, y San Jorge, en Santa Fe".
Otros cordobeses, esta vez los de Río Cuarto, aportarán sus investigaciones —una de las pocas en todo el país— en genotoxicidad, nada menos que el estudio sobre cómo los factores contaminantes pasan de una generación a otra y pueden llegar a afectar hasta tres generaciones.
En tanto, la Universidad del Litoral aborda específicamente los impactos sobre la fauna, un punto no menor si se tiene en cuenta, destaca Oliva, que "los animales son centinelas de lo que sucede en los humanos"; y los investigadores de Entre Ríos son los especialistas en cambio climático.