El gobernador Miguel Lifschitz resaltó ayer, durante el acto que antecedió a la llegada del presidente, que "hace falta un país con valores morales y éticos que le garantice a sus habitantes, vivan donde vivan, oportunidades para desarrollar una vida digna para poder forjar así un proyecto de vida".
El mandatario provincial destacó además que "Rosario abre sus brazos para recibir a todos, piensen como piensen y vengan de donde vengan".
Por su parte, la intendenta Mónica Fein apeló al ejemplo del general Manuel Belgrano y a su herencia en valores. "Rosario supo entender su legado porque es solidaria con los que menos tienen y los que más sufren. Honrar esta bandera es luchar por un país sin impunidad y una ciudad amplia y generosa para todos", señaló.
Los discursos llegaron temprano, en una mañana muy fría que tuvo como corolario el desfile cívico-militar que antecedió al acto central que encabezó el presidente Mauricio Macri (ver página 6).
Lifschitz instó a recibir "a todos, piensen como piensen", para convocar a la construcción "de un país más justo, con valores morales y éticos, que garantice a sus habitantes oportunidades para desarrollar una vida digna".
Resaltó que la enseña patria "nos cobija a todos" y sondeó en la historia de Belgrano, su actitud rebelde y su reafirmación de convicciones en contraposición de las órdenes de Buenos Aires. "Era un patriota en todo el sentido de la palabra, íntegro, y que abrazó las armas porque su patria se lo pedía. Cada una de sus actitudes es una enseñanza y un ejemplo ético, moral y político para los nuevos tiempos", resaltó para recordar: "Murió en la pobreza, olvidado por sus contemporáneos".
"Hace falta un país con valores morales y éticos que le garantice a sus habitantes vivan donde vivan, cualquiera sea su condición social; oportunidades para desarrollar una vida digna para forjar un proyecto de vida", destacó Lifschitz.
Celebró la jornada que tuvo a Rosario como epicentro de los festejos nacionales. "Queremos que sea un día de fiesta. De todos los argentinos, en el que Rosario abre generosamente sus brazos para recibir a todos; piensen como piensen, vengan de donde vengan. Unidos por los colores de la celeste y blanca por un solo proyecto: un país con desarrollo y justicia social".
Solidaria. Fein, en tanto, apeló al ejemplo de Belgrano. "Rosario supo entender su legado porque es solidaria con los que menos tienen y los que más sufren. Honrar esta bandera es luchar por un país sin impunidad y una ciudad amplia y generosa para todos", señaló.
En tal sentido, destacó el compromiso de los trabajadores y sindicatos; y la generosidad de los ex combatientes de Malvinas. "Esta ciudad sabe que lo importante son cada una de las personas que la habitan. En este día el mejor modo de rendir tributo a nuestra bandera es comprometernos en políticas públicas que piensen en la igualdad y la equidad", destacó Fein.