El abordaje de los casos de embarazos en niñas se puso bajo la lupa con el caso de María, una nena de 12 años, que fue atendida en la Maternidad Martin y cuyo bebé fue dado en adopción en un proceso que llegó a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) y del que ahora piden informes en la Legislatura provincial. La directora de Servicios de Salud de la Secretaría de Salud de la Municipalidad, Nora Redondo, planteó que "se trata de situaciones que requieren un abordaje especial", y recalcó que "hay que priorizar los derechos de la madre niña y del recién nacido" en un trabajo que se lleva adelante "desde las áreas de salud y salud mental conjuntamente con trabajo social".
Los registros oficiales de las niñas que se convierten en madres entre los 10 y los 14 años corresponden a las maternidades públicas de la provincia y representan un 2 por ciento de los partos totales que se asisten en el sector público, lo que representa un parto por día en los efectores santafesinos.
"Ante un caso de estas características y en menores de 14 años, lo primero que se hace es despegar la posibilidad de que sea producto de una violación, o incluso ante la situación de que sea a partir de una relación con consentimiento debe verse si fue con otro menor o si aparece como consentida pero fue un abuso por parte de un mayor", explicó la funcionaria.
Planteado esto, Redondo indicó que "siempre requieren un abordaje especial", y en las situaciones donde se indica la decisión de una adopción tanto en los centros de salud como en la maternidad "ese proceso debe acompañarse para garantizar la libre decisión de esa niña o mujer".
"Se trata de casos que requieren un abordaje especial y donde la prioridad está en los derechos de esa madre niña y del bebé recién nacido", insistió la responsable de Servicios de Salud.
Complejidad. La funcionaria explicó que más allá de que "en los casos de niñas se abordan como embarazos de riesgo con controles de mayor frecuencia", también se involucran las áreas de salud mental y trabajo social. "El cuidado de la madre y el bebé son el interés superior, y en los casos donde la adopción aparece como una alternativa se le da prioridad a la familia ampliada", detalló.
Sin embargo, aclaró que "cada caso es particular" y advirtió la "complejidad" de las situaciones, sobre todo cuando involucran a niñas.
"Puede pasar que manifiesten la voluntad de dar al recién nacido en adopción y luego haya un arrepentimiento de esa decisión, o viceversa", indicó, antes de afirmar que "lo que debe hacerse es acompañarlas en esas instancias preservando ante todo que la decisión que tomen sea libre y no inducida por adultos, sobre todo en el caso de menores".