El presidente de la Asociación Amigos de la Peatonal Córdoba, Nelson Graells, propuso que se contemple otorgar una tarifa de luz especial para que los comercios puedan dejar las marquesinas iluminadas durante la noche, lo que redundaría en un ámbito que brindaría mayor seguridad al área central.
Graells puntualizó que ese tipo de tarifas se aplica en varias ciudades del mundo. "Acá, como las tarifas de la luz se fueron muy altas, muchos comercios apagan la luz de las marquesinas", indicó. Esa situación, sumada a la deficiente iluminación pública de la peatonal, torna al área más neurálgica de la ciudad en un reducto oscuro y, por ende, inseguro.
En tal sentido, la propuesta de la Asociación Amigos de la Peatonal Córdoba también incluye una repotenciación de las luces de las peatonales. "Tenemos una iluminación muy tenue, habíamos pedido que se colocaran leds para dar otra sensación y mayor poder lumínico", detalló Graells.
No obstante, y en un intento porque el centro retome estándares de seguridad, el empresario también reclamó la colocación de otra garita policial (a las ya existentes por la peatonal Córdoba, en las intersecciones con Laprida y con Paraguay) en la intersección con Mitre.
"En esa esquina había una garita policial que funcionó hasta 2008, y la gente podía ser asistida, socorrida ante un robo, se contenía a los vecinos. Ahora tenemos las otras garitas y el carrito eléctrico que patrulla toda la peatonal, pero falta personal y su funcionamiento es a medias; no se cumplen horarios completos. Tenemos empleados que salen 20.30 de los locales y hay que brindarles seguridad", reclamó Graells.
Colectivos. El empresario sumó otra preocupación, relacionada a las obras que se están realizando en el casco histórico de la ciudad.
"Con estos trabajos en marcha en calle Entre Ríos y ya a punto de comenzar en las calles Sarmiento y Mitre, se trasladarán las paradas de los colectivos hacia otras esquinas. Esto implica que la gente deberá caminar unas cinco cuadras más ¿Esta prevista mayor vigilancia?", se preguntó.
El interrogante inquiere respuestas oficiales que aún no han obtenido.
Mientras tanto, producto de la caída en las ventas, la escasa iluminación pública y las marquesinas apagadas para atemperar los impactos de facturas de luz muy abultadas, el área neurálgica de la ciudad aparece cada vez más deprimida.