A partir de ahora arranca una nueva campaña con sólo ocho listas, y no las 43 de las primarias, que se disputarán 13 bancas al Concejo el 23 de octubre.
A partir de ahora arranca una nueva campaña con sólo ocho listas, y no las 43 de las primarias, que se disputarán 13 bancas al Concejo el 23 de octubre.
Si los resultados del domingo pasado fueran los definitivos, Cambiemos se consolidaría a partir de diciembre como primera minoría con 9 concejales, pero podría ser alcanzado por el justicialismo (si mantuviera los números actuales y se uniera en un solo bloque), mientras que el Frente Progresista —aun con este magro presente— perdería un edil y se quedaría con 6, Ciudad Futura subiría a cuatro y varios monobloques quedarían afuera.
Según los números provisorios de las elecciones Paso a concejal, el PRO accedería a seis bancas (Roy López Molina, Anita Martínez, Carlos Cardozo, Agapito Blanco, Germana Figueroa Casas y Renata Ghilotti), el peronismo a cuatro (Roberto Sukerman, Norma López, Andrés Giménez y Alejandra Gómez Sáenz), el Frente Progresista a dos (Pablo Javkin y Verónica Irizar) y Ciudad Futura a una (Eduardo Trasante).
Fotografía
Pero todos los referentes de los distintos espacios políticos consultados por LaCapital admitieron que el resultado del domingo "es una foto" y no el final de la película que se verá dentro de poco más de dos meses. "Empieza otra etapa totalmente nueva", coincidieron.
Los candidatos que tuvieron interna y ganaron, reconocieron que tienen que tratar, como mínimo, de retener los sufragios conseguidos por sus competidores que jugaron por adentro y salir a buscar entre los votantes que optaron por otras listas que no superaron la barrera del 1,5 por ciento y entre los ciudadanos que no participaron en la primera vuelta. Se trata de, ni más ni menos, que alrededor del 70 por ciento de los hombres y mujeres mayores de 18 años inscriptos en el padrón.
Los ahora ocho candidatos que encabezaron listas el domingo y que competirán en octubre sumaron ellos solos 252 mil votos. Seis de ellos seguramente captarán, en gran medida, los 120 mil votos que se volcaron por un competidor de su interna. Por ejemplo, Roy López Molina, apunta a retener los 68 mil que sacó Anita Martínez; Roberto Sukerman los 39.500 sumados de las otras siete listas y de peronistas que fueron por afuera, como Armando Perichón, que sacó 5.042 votos, entre otros.
Pero dentro de los interrogantes que se abren, está el de saber qué harán los votantes que eligieron dentro del Frente Justicialista al ex jugador de fútbol leproso, Ariel Cozzoni, tercero en la interna. También si parte de radicales que decidieron jugar en la pelea de Cambiemos optarán por sufragar por candidatos como Martín Rosúa o Daniela León, ahora candidata por el massismo.
Por fuera de todo esto hay alrededor de medio millón de votos conformados por quienes eligieron otra opción para concejal (que no superó el 1,5 por ciento) y anulaciones, entre otras cuestiones que alcanzan también a los ciudadanos que no sufragaron. Un caudal que puede provocar la multiplicación votantes. Así ocurrió entre las Paso y definitivas de 2015 en las que, por ejemplo, las tres ofertas de la izquierda que sortearon las Paso amplificaron su cosecha.
Todos aspiran a lo mismo, pero a diferencia de 2015 hay dos cargos menos en la disputa a concejal, por lo que el "piso" para entrar al Palacio Vasallo es más alto en esta oportunidad.