La tierra en Italia sigue temblando y no da tregua: desde el fuerte terremoto del domingo se han registrado ya más de 1.100 réplicas en la región afectada. La réplica más fuerte de magnitud 4,8 tuvo lugar ayer y provocó más daños materiales.
La tierra en Italia sigue temblando y no da tregua: desde el fuerte terremoto del domingo se han registrado ya más de 1.100 réplicas en la región afectada. La réplica más fuerte de magnitud 4,8 tuvo lugar ayer y provocó más daños materiales.
El primer ministro Matteo Renzi prometió ayuda en una visita a la región afectada. Tras el último temblor fuerte se registraron nuevos derrumbes, dijo el alcalde del pueblo de Ussita, Marco Rinaldi. "Es un calvario, nunca se acaba", dijo. También el alcalde de Castelsantangelo sul Nera reportó nuevos daños.
Según el servicio de sismología, el movimiento telúrico del domingo, el más fuerte registrado en los últimos 36 años, deformó una superficie de 130 kilómetros cuadrados. El mayor desplazamiento fue de 70 centímetros y se registró en la localidad de Castelluccio.
Más de 15.000 personas fueron llevadas a los almacenes de protección civil, informaron las autoridades. Pero el número de personas que se han quedado sin vivienda se estima que es muy superior. Tan sólo en la región de Las Marcas se estima que son unas 25.000, mientras que en Umbria serían unas 5.000.
El terremoto ha dañado localidades históricas en la región de los Apeninos e incluso también ha provocados daños en Roma, la capital. No hubo muertos en parte también porque muchas localidades ya habían sido evacuadas tras el fuerte terremoto de agosto, en el que perdieron la vida 298 personas. También numerosos bienes culturales han sufrido daños. Así, el puente Mazzini sobre el Tíber, que une el barrio de Trastévere con el centro histórico de Roma ha sido cerrado. También la basílica de San Pablo Extramuros está siendo analizada por los expertos ante posibles daños.
Asimismo se han cerrado dos iglesias en el centro: la de San Francisco en el barrio Monti y la de plaza de San Eustaquio, que se encuentra en las inmediaciones del Panteón. Las escuelas y los jardines de infancia permanecen cerrados.