Una testigo del incendio en un edificio de Londres relató que fue imposible ayudar a las personas atrapadas que gritaban desde dentro debido a lo rápido que se extendieron las llamas.
"No pudimos hacer nada. Vi gente con sábanas en las ventanas. Mis amigos vieron cómo algunas personas saltaban desde las ventanas en lo alto", dijo la joven. Por su parte, un grupo de residentes de la Torre Grenfell aseguró hoy haber alertado reiteradamente sobre el peligro de incendio en el bloque de viviendas sociales en el oeste de Londres que fue consumido por las llamas.
El Grenfell Action Group denunció haber escrito "numerosas advertencias en los últimos años sobre los bajos estándares de seguridad antiincendios en la Torre Grenfell y en general en RBKC", en referencia a Royal Borough of Kensington and Chelsea, el responsable del edificio.
"Nuestras advertencias cayeron en saco roto pese a que nosotros predijimos que una catástrofe como esta era inevitable y cuestión de tiempo", lamentó el grupo tras el incendio, que dejó varios muertos y más de 50 heridos.
En una entrada de blog en noviembre, el grupo acusaba a la firma que administra el edificio de 120 viviendas sociales a nombre de las autoridades locales, la Kensington and Chelsea Tenants' Management Organization (KCTMO), de permitir "condiciones de vida peligrosas e ignorar la legislación sanitaria y de seguridad".
"El Grenfell Action Group cree que la KCTMO evitó por muy poco un desastre de grandes proporciones en 2013, cuando los residentes vivieron un periodo de terribles picos de tensión eléctrica que se descubrió estaban causados por un cableado defectuoso", afirmó el grupo. "Creemos que nuestros intentos por destacar la gravedad de este hecho fueron tapados por la KCTMO con ayuda del comité de control del RBKC, que se negó a investigar las preocupaciones legítimas de los arrendatarios e inquilinos", añadió.