Esta atleta estadounidense se llama Cesilie Carlton y tenía algo más de tres mil seguidores en su cuenta de Instagram. Pero un video de un impresionante salto a la piscina de un crucero rápidamente acrecentó su fama en la redes. La zambullida no sólo superó las 650 mil visitas en un par de semanas sino que también apareció en medios de comunicación de todo el mundo.
Mientras pasaba sus vacaciones en el el crucero Royal Caribbean, el más grande y lujoso de la compañía Harmony of the Seas, la deportista de riesgo se lanzó desde un trampolín ubicado a 17 metros de altura, siete metros más del máximo que saltan los profesionales olímpicos. Hay que aclarar que abajo la esperaba un buen aterrizaje: la piscina más alta y profunda de altamar, de 6,60 metros de profundidad y 15,70 metros de longitud.
Carlton es conocida por saltar desde acantilados, montañas y precipicios patrocinados por Red Bull. Pero su fama se disparó desde que se trepó a ese trampolín a 17 metros de altura. "Tenemos la piscina más profunda del océano. El barco se mueve continuamente de un lado a otro. El agua puede derramarse y salirse de la piscina. Es muy peligroso lo que ha hecho Cartlon", explicaba Sydney Brown, una miembro de la tripulación que fue testigo del salto, al diario de viajes MailOnline Travel.
Brown indicó que Casilie, de 25 años, se arrojó desde una altura equivalente a seis pisos a "la piscina más profunda del mar". Harmony of the Seas construyó en su Royal Caribbean el Teatro Acuático, un espacio destinado al espectáculo. Gimnasia artística, natación sincroniza, ballet marino o salto de trampolín son algunas de las actividades que tienen lugar en este recinto.
Los shows suelen estar en el Royal Caribbean de seis a nueve meses y tienen lugar una o dos veces por semana. La actuación de Cartlon fue una excepción, ya que no había nada programado. La deportista, que le dio la medalla de oro a Estados Unidos en el Campeonato Mundial Acuático del año 2013, pasó dos semanas en la embarcación de lujo "y un buen día se despertó y lo hizo".