El ex concejal de Sastre, Eduardo Giménez, acusado de golpear ferozmente a la representante legal de su esposa y a la oficial de Justicia cuando intentaban concretar una orden judicial de exclusión del hogar por violencia de género, continuará preso y será sometido a una nueva audiencia a realizarse en Santa Fe el lunes próximo, en la que se definirá su situación procesal. El ex legislador, de profesión farmacéutico, se negó a declarar en la audiencia imputativa realizada ayer y no hubo objeciones de parte de la defensa respecto a la detención ni a sus aptitudes para continuar con el proceso judicial. En la reunión de ayer, se lo impuso de las acusaciones que pesan sobre él por haber cometido los delitos de doble homicidio en grado de tentativa y atentado a la autoridad calificado. También se le sumó otra imputación por amenazas denunciadas tiempo atrás por su esposa.
Durante el encuentro el fiscal, Carlos Zoppegni, ofreció a la defensa que se disponga un cuarto intermedio para luego tratar su pedido de prisión preventiva, pero la titular del servicio público de la defensa, Patricia Hidalgo, quien representó a Giménez, se opuso alegando que no tenía a la vista el legajo y necesitaba tiempo para estudiarlo.
Ese trámite se pospuso entonces para una nueva audiencia que se realizará el lunes próximo a las 11 en Santa Fe, por razones de traslado del caso a la Fiscalía de turno por el transcurso de la feria judicial, cuyo titular aún no fue asignado. Allí se decidirá si Giménez continuará detenido en forma preventiva, si se le impondrá fianza o continuará el proceso penal en libertad.
En el primer trámite del proceso la defensa no hizo planteos por cuestiones de inimputabilidad restando fuerza a una de las hipótesis que se barajaban que sostenía la posibilidad de que suspendieran la audiencia imputativa y se disponga la internación del acusado.
En ese sentido el fiscal dijo a este diario que "había documentación médica importante como para que no pudieran avanzar con una petición de esa naturaleza".
Zoppegni estimó que, según las características del caso, los fiscales que continúen con los trámites hasta que la causa retorne a él luego de la feria judicial, "seguramente solicitarán la prisión preventiva bajo el sustento de riesgos que pueden obstaculizar la investigación".
La pena mínima estimada para los cargos que se le imputan al farmacéutico, en caso de que resulte condenado, fue estimada en cinco años y cuatro meses y una máxima de 20 años. De resultar una pena comprendida entre estos parámetros "seguramente por la cuantía el magistrado que condene ordenará la ejecución efectiva", indicó Zoppegni.
El caso del ataque del ex edi a las funcionarias impactó sobremanera a la comunidad del sistema judicial judicial de la provincia. Uno de los indicadores fue la alta concurrencia que presenció las instancias de la audiencia y la circulación de comunicados para repudiar lo ocurrido de parte del Colegio de Abogados, del Sindicato Judicial, de la Asociación de Abogados del Departamento San Martín y entidades defensoras de los derechos de la mujer, entre otras instituciones.
Recuperación. La abogada Sosa fue intervenida quirúrgicamente el viernes en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez (Heca) de Rosario y ahora permanece bajo cuidados intensivos. "La operación fue exitosa y su estado de salud es alentador" dijeron desde el nosocomio y cuando los profesionales lo consideren apropiado será trasladada al sanatorio Parque para continuar con los tratamientos de recuperación. En tanto Mussano se repone de las lesiones y su estado de salud es bueno.
El ex concejal Giménez protagonizó el jueves el brutal ataque contra las dos integrantes del Poder Judicial cuando visitaron su vivienda para ejecutar una orden de exclusión domiciliaria por una denuncia de su esposa por violencia de género. Tras permitirle el ingreso a su casa las golpeó con un hierro provocándoles heridas de gravedad.Tras el ataque, el ex edil se entregó a la comisaría.
Los vecinos de su residencia dijeron a este diario que eran frecuentes las intensas discusiones de Giménez con su pareja. Para el resto de la población y para quienes no eran allegados lo sucedido fue sorprendente. Es que el farmacéutico tenía una vida social activa vinculada al deporte, a las instituciones y mostraba un perfil de ciudadano afable y cordial.